Cd. Victoria, Tamaulipas.- Con mucho ánimo, echados pa´delante, los tricolores registraron a sus precandidatos a alcaldes en 25 municipios.
El ánimo les vino después que en 2020 sus candidatos “barrieron” en las alcaldías del estado de Hidalgo y diputaciones en Coahuila. Creen que su partido vuelve por un segundo aire para reconquistar ayuntamientos y gobierno estatal.
Lo que no dicen es que en esas entidades hermanas gobierna el Revolucionario, y se trató de una auténtica elección de estado dirigida por los Gobernadores.
Es una tendencia que los poderes locales tratarán de repetir en los comicios del próximo seis de junio, metiéndole arto dinero proveniente del erario.
Nada fácil para el PRI en Tamaulipas, y menos cuando parece ir de común acuerdo con el PAN para frenar el avance de Morena. No quisiéramos pensar que van de comparsa en todo, o que ya se repartieron posiciones, porque hay auténticos y honrados priístas.
Le dimos una “vueltecita” a la lista de “unidad” –únicos-, y mire que resalta el nombre de Servando López Moreno, de Miguel Alemán, quien va por la reelección, aparte de varios ex que quieren regresar por sus fueros.
Pero hay una historia de poder que enternece, a la que indebidamente pocos –que no sean del círculo partidista- han puesto atención.
Se trata de Abasolo, uno de los escasísimos que el tricolor pudiera conservar, por el cacicazgo que ya dura once años y amenaza continuar.
La presidenta Yésika Selvera Garza quiere dejar en el poder a su maridito Rubén Curiel Curiel, actual presidente del DIF local. Ella no puede reelegirse porque lleva dos periodos, uno de dos años y otro de tres.
Si gana la planilla solo cambiarían los factores: Ella al DIF y su viejo a la silla municipal, que en última instancia viene siendo lo mismo.
El matrimonio se acostumbró a disfrutar del presupuesto, y quien sabe por qué razones desde el CDE les dieron el visto bueno para que el esposo sea el abanderado, algo que pensamos había desaparecido por ser inmoral, que no ilegal.
Todo en familia se comparte mejor.
En el trienio 2011-2013 fue alcalde Juan Antonio Curiel Curiel, hermano de Rubén, y nombró como su tesorera a Yésika Yanet.
Y cómo no van a tener posibilidades de ganar si los monarcas del pueblo mantienen un programa llamado “siempre contigo”, que consiste en entregar mil pesos en efectivo a cada residente, “en todas las comunidades”.
Es una función que siempre alternan Rubén y Yésika, nadie más.
Cuando él llegue a la presidencia estará en condición de reelegirse y, si algo falla, por aquello de la fiscalización de la Auditoría Superior, hay más familia: Elsa Curiel Curiel ya fue regidora, y están Miguel y Rafael, de los mismos apellidos.
La Auditoría siempre los ha traído cerca, a Toño, a Yésika y al gerente de la Comapa, Ramiro Rodríguez Amaro, lo cual es otra historia.
Si continuamos con los registros, en Valle Hermoso será candidata Rosa Isela Pesina, ex candidata perdedora a la diputación por el noveno distrito que cubre parte de Matamoros. Es la presidenta del CDE priísta.
En González echaron mano del ex presidente Andrés Núñez Ramos, periodo 1984-1986, a quien en 2018 desde la CNC le negaron la postulación y pudo haber ganado.
Otro presidente local del Revolucionario que alcanzó boleto es Luis Gerardo Montes Vega, de El Mante. Para llegar tendría que derrotar a la poderosa maquinaria de Los Trucos, los caciques de la zona cañera.
Por Madero será candidato Adolfo Martínez Tapia, médico de profesión, jubilado de Pemex, conocido como “el doctor de los futbolistas” por aquello de practicar esa disciplina a nivel llanero. Se acaba de recuperar de coronavirus.
Ahora mismo el PRI tiene –eso se entiende- seis alcaldes. Al menos ganaron por las siglas en el 2018, entre ellos Francisco López Villafranca, de San Carlos, quien alcanzó el triunfo en las urnas desde el penal de Tamatán donde sigue recluido.
El suplente ejerció los tres años, pero no se sabe si va por la reelección, ni de Sandra Verónica Benavides Castellanos, de San Nicolás.
No están definidos los municipios de la zona de influencia de la Brigada Cívica Pedro J. Méndez.
Donde siguen en problemas es en Morena. El jefe estatal Enrique Torres Mendoza persiste en sepultar al partido antes de entregar en 2021, su prolongada estancia de siete años.
La Sala Superior del TRIFE dio entrada a la denuncia del profesor Torres y el jefe del Consejo Estatal, doctor Jaime Oyervides (léase intereses de JR Gómez Leal), en contra de la alianza con el PT que depositaron en el IETAM, para ir juntos en los 22 distritos de mayoría y 41 presidencias.
A lo que dicen los datos –aparte de si se reencausa hacia el Trieltam- tal coalición podría ser echada abajo en los siguientes días con el consiguiente costo político para los morenistas, que no para el PT porque no tiene nada que perder y sí ganar.
Luego de vacaciones decembrinas, este lunes regresa a labores el personal administrativo de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, en tanto que las tareas académicas hasta la semana entrante.
El miércoles serán publicados los resultados de la “Beca Covid-19”, según el acuerdo del Rector José Andrés Suarez Fernández, por la cual se apoya el primer semestre 2021 con hasta por el 50 por ciento de las colegiaturas, a estudiantes de escaso recursos nivel técnico y licenciatura.