Cd. Victoria, Tamaulipas.- Como dicen en el rancho: Era muy ojona pa´ser paloma.
Hubo más “listos” que Diana Chavira Martínez y ella se quedó sin la candidatura al senado de la República, posición en la que tampoco tiene alguna esperanza de llegar a las nóminas por ir en segunda fórmula.
El TRIFE regional le dio revés a su postulación por dos denuncias que existían en su contra, pero la resolución no beneficia a quienes se quejaron, en este caso Emiliano Canales Fernández, el dirigente estatal del Movimiento Ciudadano, y Ma. Del Consuelo Sáez Sustáita.
Lo que sí quedó demostrado es que entre las tribus perredistas y el Movimiento Progresista los bandidos son grandes.
De acuerdo con los datos del Tribunal Electoral, inicialmente fue registrada Sáenz Sustáita como aspirante al senado por la coalición de las izquierdas.
Más tarde el Instituto Federal Electoral canceló el registro por una “renuncia” que presentó “con carácter de irrevocable”.
Al investigar los hechos, los magistrados se encontraron con que la firma de la renuncia no coincide con la que Consuelo utiliza en su credencial para votar. Luego entonces le falsificaron su gancho.
Pero otro dato: Los jefes del PT, el partido que la proponía, “hicieron” la renuncia de la Sáenz antes de que la registraran formalmente ante las autoridades electorales.
De ese calibre son las pillerías de los dirigentes de los partidos de izquierda. Dan miedo con solo mencionarlos.
Y con la vara que midió Chavira, así fue medida en cuanto a la posición que ocupaba en la lista plurinominal rumbo al senado.
Iba en la posición cuarta de la lista plurinominal apoyada por el mismo Partido del Trabajo, con lo cual tenía asegurado su ingreso a la nómina del Congreso de la Unión ¿cómo le hizo? Quien sabe. La precedían solo elementos como Manuel Bartlet Díaz y Ana Guevara, la velocista.
El gustito le duró poco a la tamaulipeca camorrera. A las siguientes semanas también presentó su “renuncia” con carácter de irrevocable y sustituida por una mujer llamada María Isidra de la Luz Rivas.
Ella, Chavira, no hizo borlote y ahí se quedó, dejó que las cosas corrieran por su cuenta.
Pero a las siguientes semanas la tal Isidra también fue borrada, o “renunció”, y su lugar fue ocupado por Geovvana del Carmen Bañuelos de la Torre, quien a lo mejor para el día de la elección, ya no está.
Bien dicen que los senadores y diputados los son hasta que cobran la primera quincena y deben asegurarse que en la nómina esté efectivamente su nombre.
¿Qué va a pasar ahora con la segunda fórmula al Senado? Corre la posibilidad de que los señores de la Comisión aliancista ratifiquen a Diana Chavira por haber permanecido en la lista casi tres meses, si bien es cierto que no hizo campaña.
La victoria de Canales Fernández y Sáenz Sustáita fue pírrica: Demandaron y ganaron, pero no ganaron nada.
El resolutivo dice que el que haya ganado Emiliano, “no significa que tenga derecho suficiente para que la referida coalición electoral lo postule como su candidato”.
Tampoco la Consuelo queda en la posición, sino que en 24 horas los partidos deben ponerse de acuerdo y “dedear” a una mujer (o ratificar a Chavira).
Por otra parte, mire que en la lista rumbo al senado por la vía de a gratis, el Verde Ecologista tamaulipeco Jesús González Macías no se movió de la posición sexta, con lo cual tiene posibilidades de cobrar allá y dejar la diputación local que ahora le da para la chuleta.
Se ve que pesa entre los gerentes nacionales del VERDE, que no lo movieron.
En cuanto al PAN, le dimos una “checada” a las listas plurinominales de la circunscripción, y siguen en el mismo lugar los agraciados con el reparto del pastel.
Sigue seguro de cobrar Ramón Antonio Sampayo, quien va en el lugar número once de la lista, seguido por Lázara Nelly González, en el número 17.
Según los conocedores, la rancherita de Mainero se “colará” otros tres años a la nómina del Congreso de la Unión sin haber hecho campaña.
Pero el que va a estar cab… orón que entre es el joven Francisco Javier Garza de Coss, quien juega en el número 20 y por tanto chupó faros y deberá desaparecer de la escena política pitufina por algunos meses. De igual, Marcelina Orta Coronado, de Aldama, es otra de las nacidas para perder.
Y a menos que un rayo se los impida, van directo a la ubre de la cámara federal los tamaulipecos Patricia Araujo de la Torres, Marco Antonio Bernal Gutiérrez y Amira Gómez Tueme.
Nadie los movió en los tres meses de campaña, y tampoco a Griselda Dávila Beas, quien en un descuido podría cobrar sus dietas a partir de septiembre en caso de que le vaya mal al PRI en las urnas.
Va en la posición 16, un lugar que ya le dio sus billetitos a Alejandro Guevara Cobos hace algunos trienios.
En el PRI es más de lo mismo con Marco Antonio Bernal y Amira Gómez. El psicólogo de Matamoros llegará por tercera vez a la cámara baja -y una en la alta-, si haber pasado por las urnas.
En temas también del proceso electoral, mire que Tamaulipas necesita por lo menos 16 distritos para cumplir caprichos de los gerentes de los partidos. Los azules dicen que ganarán los ocho distrito y los del Verde, por voz de Patricio King, afirman que se llevarán cuatro diputaciones. Por su parte los amarillos reiteran que colocarán a cuatro de sus hombres.
Pura hociconeada pero bueno, tienen derecho, tienen su libertad a decirlo.
Y este lunes, el candidato del PRI a la diputación por el V distrito, Enrique Cárdenas, no tendrá conferencia de prensa.
Mejor nos vamos cuando se informa que el PAN organizaba “gayo” la tarde de este domingo desde el Tres bulevar López Portillo utilizando vehículos oficiales y hasta tractores de instancias de la SAGARPA.