Cd. Victoria. – Desde Nuevo Laredo, la noticia corrió como reguero de pólvora: Los maestros se salieron con la suya, “doblaron” al gobierno del estado con mucho más de lo que inicialmente pedían.
La tarde del sábado, el dirigente de la sección 30 del magisterio daba a conocer que consiguieron con el Gobernador Egidio Torre Cantú nada menos que 18 cargos administrativos, “como una negociación inicial”.
Presuntamente los cargos, ya específicos, se darán a conocer este lunes y podrían obsequiarse no solo en la secretaría de Educación sino en otros organismos donde no está descartada la UPYSSET.
Pero no solo eso, los profes anunciaron que también consiguieron “posiciones” en los 43 municipios a través de la dirección de Fortalecimiento Educativo, Desarrollo Educación o como se llamen.
Y se mencionan muchas, muchas más conquistas, algunas justificadas, como incrementos salariales, y otras que no les corresponden, como más escuelas y por tanto contratación de más profesores.
El dato establece que, de antemano, los profes tendrán ya un aumento salarial desde el uno de enero estén o no dentro de una revisión contractual.
Quien sabe como lo tomen en palacio de gobierno, pero desde las gradas esto solo se entiende como debilidad en el mando, en las decisiones.
Y para ellos, para los profesores, es una conquista más y se reafirma el liderazgo de Arnulfo Rodríguez Treviño, quien sacó provecho de la nada.
Las palmas son para él y para El Esther Gordillo, la presidenta vitalicia del SNTE.
Los maestros, en unidad, ya demostraron el camino para obtener lo que quieren.
No por algo son la organización más fuerte en Tamaulipas, aunque ellos auspicien y mantengan un partido diferente al que hoy está en el gobierno.
Se supone que ellos -los líderes- para eso están, para aprovechar las coyunturas en provecho de los suyos. Y la encontraron, la supieron encontrar argumentando promesas de quien hoy está en el cielo, de Rodolfito ¿serían ciertas sus promesas?.
Así las cosas, lo más probable el que el gobierno termine de echar reversa y destituya a los subsecretarios que ya estaban nombrados y hasta cobraron su primer quincena.
Al rato otros gremios van a amenazar con paros para conseguir provecho personal.
Ya veremos qué ocupe en el transcurso de la mañana del lunes en palacio, si en efecto se dan a conocer las 18 posiciones en la administración de Egidio y en cada municipio (aunque es asunto de los alcaldes), y todas las demás conquistas anunciadas, como plazas e incrementos salariales.
En otro tema, mire que después de siete años dejó la delegación de la PROFEPA el joven Efraín Rodríguez Hernández, panista, ex regidor, gente que fue de Leonor Sarre Navarro.
Lo sustituye Pablo César Tamez Molina, un psicólogo originario de Temixco, estado de Morelos ¿será esa la especialidad que se necesita para vigilar la tala de los bosques?.
La otra experiencia laboral que ha tenido el joven Tamez es la de jefe de prensa del ayuntamiento de su terruño.
En cuanto a Efraín, pues mire que el muchacho es muy ahorrativo, tanto que en esos siete años de delegado pudo comprar dos casitas, una por valor de 650 mil pesos, de la que se hizo en mayo del 2006, y la otra por un millón 901 mil 760, y que data de agosto del 2010.
Claro que es un elemento que se ha formado con esfuerzo. Vendiendo afores de Banorte sacó para hacer su carrera de Leyes y apenas en el 2001 ingresó como empleado de Migración con Sarre Navarro.
Después de todo, ser panista es muy buen negocio.
Y bueno, otra reversa del gobierno del estado es en cuanto a la prohibición de minifaldas y ropa ajustada por parte de las mujeres que laboran en las dependencias, como Salud y Administración.
Ello, aunque tenga usted la seguridad de que nadie le había hecho caso al médico Treviño García Manzo y menos a Don Jorge Abrego Adame, secretarios de salud y Administración.
Es bueno que el gobierno lo aclare porque el asunto había llegado a los medios de comunicación nacionales, y se hacía burla y escarnio de lo conservadores y espantados que son los nuevos funcionarios.
El área de prensa envió un boletín de aclaración, el que debió haber sido ordenado por el Gobernador. Lo hubieran aclarado desde antes para evitar tanto desprestigio a Tamaulipas.