Cd. Victoria.- Mire que en buena bronca se encuentra metido el presidente del Instituto Electoral de Tamaulipas, Jorge Luís Navarro Cantú: Una demanda laboral que presentaron en contra del organismo empleados del desaparecido Partido Social Demócrata.
Pero la bronca no es tanto que el instituto haya sido el patrón de seis trabajadores del partido que perdió su registro el año anterior.
No, lo delicado es que el IETAM debió haber “limpiado” y sepultado los restos de ese putrefacto cadáver que dejó a flor de tierra el neoleonés avecindado en Tamaulipas, Gerardo Acosta Zavala.
De acuerdo con la Ley, el partido debió haber sido liquidado y sus bienes regresar al gobierno del estado, de donde se supone salió el subsidio para mantenerlo.
Acosta “desapareció” todos los bienes que había en el partido, desde escritorios a vehículos, contando con la anuencia o complicidad del IETAM.
Lo otro es que quedó “pendiente” una lanilla, aproximadamente 400 mil pesos, que se supone se “clavó” el organismo si es que no se los entregó indebidamente a Zavala.
Podría suceder lo mismo que en el caso del PRD, cuando las autoridades laborales –hace dos meses- embargaron las cuentas del partido y los subsidios del Instituto Electoral para cubrirle su liquidación al abogado David Zárate Cruz.
Vamos, ese recurso desaparecido, mas otros “piquitos” por ahí, son suficientes para cubrir la liquidación de los seis trabajadores que demandan su lanita.
El asunto se lleva en la Junta Local de Conciliación, y cada día que pasa se acumulan más deudas.
El embrollo amenaza con volverse noticia nacional porque el IETAM podría ser demandado por no liquidar el PSD y permitir el saqueo y la corrupción de quienes fueron sus dirigentes.
El dato establece que primero Miguel Gracia Ristra y luego Jorge Luis Navarro Cantú, jamás llamaron a cuentas al señor Zavala, hoy por hoy uno de los más longevos vividores de la política en Tamaulipas.
En la última campaña local -en julio-, a Zavala se le ubicó en Río Bravo al lado del candidato tricolor, el mismo que perdió ante la embestida de los azules, según la decisión del Instituto Estatal Electoral.
Zavala no ha corrido mucho, aquí está cerquita como para que lo alcance el largo brazo de la Ley.
Pero si la Ley no lo alcanza por allá, a lo mejor pronto llega a ciudad Victoria representado a otro partido, según el encargo que le hagan sus jefes.
Antes de “hacerse líder” del PSD, el 15 de marzo del 2008, el muchacho estuvo en la dirigencia del Partido del Trabajo; luego se hizo diputado federal por el PRI; se fue a Río Bravo donde militó en el PRD y ahora nuevamente figuró en la campaña tricolor.
Tema aparte, el legislador mantense Eugenio Zermeño González, fue electo presidente del Congreso del Estado durante el mes de octubre. Pero no, no le tocará recibir o “contestar” el último informe del Gobernador Geño Hernández.
Si otra cosa no sucede, la ceremonia del VI informe deberá realizarse el domingo 28 de noviembre en el lugar que él designe (posiblemente el centro de Convenciones de Reynosa).
Ya veremos quien queda de presidente el mes siguiente, si Felipe Garza Narváez o Guadalupe González Galván, que son los que manejan a su antojo el legislativo.
Por cierto, este miércoles se retiró el diputado panista Francisco García Cabeza de Vaca. Se va como jefe del Corett a nivel nacional.
Cuando todavía no llega, ya se pronostica que no durará en la chamba por su afición a los recursos malhabidos, públicos o que estén a su alcance.
En dicho organismo, lo colocan en el lugar para hacer negocios con terrenos nacionales y ejidales. Y el hombre esta acostumbrado a servirse con la cuchara grande.
Poder político no lo tendrá. En Tamaulipas, la representación consiste en un delegado y su secretaria.
En cuanto al sucesor en el Congreso, sí, ahora sí llegará su suplente, Doña Rebeca Enríquez Aregullín, otra de las vividoras del sistema.
Hablando de diputados, pero de los electos, los tricolores plurinominales ya tienen en sus manos la acreditación respectiva. Se las entregó el moreno dirigente del CDE.
Pero mire usted que, a pesar de que apenas son cuatro cráneos, el que va en primer lugar de la lista, el que tiene bien seguro su cobro en la nómina, Abdíes Pineda Morín, simplemente le hizo el feo al jarocho y no se presentó.
Dicen que es gente de Cruz López Aguilar, el jerarca cenecista, y fue el espacio que le abrieron los tricolores en el equipo de Rodolfo Torre Cantú para que su grupo aceptara la candidatura. No se le pronostica ningún futuro.
Ahí está Antonio Martínez Torres, en el tercer lugar, de quien se dice podría encabezar el Poder Legislativo durante los próximos tres años.
Toño es el político completo, el que sirvió en la General de Gobierno a Eugenio y podría repetir con Egidio.
Antes de irnos, el comentario sobre la próxima terminación del nuevo edificio de la facultad de Enfermería de la UAT en ciudad Victoria, cuyos avances fueron supervisados por el rector José Ma. Leal.
Las instalaciones se ubican en lo que será el Campus de la Salud al oriente de la capital, cuyo epicentro es el Hospital Regional.
El rector fue informado por los funcionarios de Construcción, que los avances son de más de un 90 por ciento, y pronto el plantel estará en condiciones de cambiarse.
Según el dato, las tradicionales instalaciones de enfermería en 21 y Méndez pasarán al centenario Hospital Civil de Ciudad Victoria.
Nos vamos.