Cd. Victoria, Tamaulipas.- El Auditor Superior, Jorge Espino Ascanio, se rebeló una vez más a los acuerdos de la Comisión de Auditoría de la 65 legislatura. Los dejó plantados.
Les negó información que le habían solicitado en un término de 24 horas, referente a 42 cuentas públicas, y ahora es él quien les giró instrucciones como si los representantes de la soberanía popular fueran sus empleados.
Al no acudir a la cita que le mandaron, para reunión a las 13:30 horas de este jueves, mandó un oficio en que les dice que la AS goza de autonomía técnica y de gestión, y que el Congreso en pleno y sus comisiones “no pueden arrogarse facultades extraordinarias ni realizar actos contrarios a la Constitución”.
En lugar de mandarles lo que le pidieron, reitera que son los diputados los que deben ir a la Auditoría a buscar los expedientes para lo cual les pide que le manden una “calendarización” de las fechas en que van a ir, para esperarlos.
Les exige que a la próxima todo requerimiento se lo hagan por escrito y que las respuestas las dará 15 días después.
Gira instrucciones a los diputados: Que le manden “una copia certificada, legible, de los acuerdos” que tomó a Comisión de Auditoría los días 23 y 24 de mayo, y se adelanta y aprovecha que también quiere la del día 25 que estaba por realizarse.
Igual les pide que le manden audios y videos de la sesión de dicha Comisión, “incluyendo la del 25 de mayo” –que todavía no se efectuaba, así como las versiones estenográficas.
Luego de dar lectura al oficio del Auditor rebelde, los diputados declararon un receso para analizar el contenido del documento y tomar acuerdos.
El receso continuaba a las 14:30 horas (jueves).