Cd. Victoria, Tamaulipas.- Los nuevos tiempos electorales ya no son de “carro completo”. Ya no es un solo partido el que se lleva solito el “pastel”.
De todas maneras, en el proceso que está en marcha, el PRI y coaligados sigue siendo favorito para alcanzar el mayor número de alcaldías y diputaciones locales en juego.
Aunque ya no es el partido único, el que alcanzaba todo, los pronósticos señalan que alcanzará una mayoría en el congreso y se llevará la casi totalidad de los escaños en el legislativo.
Si hacemos historia, está muy lejos aquel cinco de diciembre de 1971 cuando Fernando “El Pich” San Pedro Salem y Juan Ledesma Escobar, alcanzaron la primera presidencia y escaño de oposición en Tamaulipas. Ganaron limpiamente Tampico.
Eran los tiempos del Gobernador Manuel A. Ravizé, quien hoy tiene un lugar en la historia por haber cedido el primer espacio a lo que se llamó Partido Popular Socialista.
En la democracia tiene que haber pluralidad, se dijo por aquellas fechas. Y la sigue habiendo para que no se piense que un solo partido es el que domina el panorama eleccionario.
En este 2013, como ha sucedido en los últimos 42 años, el partido tricolor “pinta” para conquistar el mayor número de municipios, sobre todo los considerados “grandes”.
Otro dato nos dice que en 1980 el Gobernador Enrique Cárdenas González “dejó ir” a su hermano Jorge con el municipio de Matamoros, apoyado por un partido palero, el PARM.
Hacia 1989 el tricolor cedió tres alcaldías a sus opositores: Matamoros, Reynosa y Mante.
Tres años después, en 1992, los azules alcanzaron Victoria y los amarillos Río Bravo. Dos en total.
Ya no era la hegemonía de los tricolores, como no la sigue siendo hoy, y fue en 1995 cuando el Gobernador Cavazos Lerma otorgó diez presidencias a los contrincantes: Madero, Nuevo Morelos, Río Bravo, Camargo, Díaz Ordaz, Matamoros, Miguel Alemán, Tampico, Valle Hermoso y Altamira.
Las oposiciones se envalentonaron y amenazaron que tres años después cubrirían de azul todo Tamaulipas, pero no pasó nada.
Cavazos supo gobernar con sus contrarios del PAN (seis presidencias), PRD (Madero, Nuevo Morelos y Río Bravo) y Altamira que había quedado en manos de la esposa de Juan Genaro de la Portilla con las banderas del Frente Cardenista.
Nada pasó, ni desorden ni anarquía.
En contra de las opiniones catastrofistas, en el año 1998 el PRI se recuperó y apenas cedió los espacios de Madero y Río Bravo al PRD. Los panistas se quedaron en cero alcaldías.
Para el 2001 tenemos una oposición que se quedó con siete presidencias; en el 2004 con cuatro y para el 2007 conquistaron nueve. El tricolor jugaba ya en coalición con otros partidos, aunque él como “mayorcito”.
Finalmente las elecciones del 2010 le dieron a los partidos minoritarios: Xicoténcatl, Antiguo y Nuevo Morelos, Río Bravo, Tampico, Padilla, Aldama y Camargo.
Esta vez el Revolucionario Institucional vuelve a ser el favorito para seguir administrando las localidades de Tamaulipas, no obstante una oposición ensoberbecida por los triunfos federales que alcanzaron en el 2012.
En concreto, en el presente proceso se pronostica que los tricolores ganarán las principales ciudades y solo cederán municipios “chicos” a los azules y amarillos.
Ahora bien, cuando estamos en el umbral de las elecciones ¿en qué porcentaje esos partidos van a abatir el abstencionismo?.
Sobre el tema solo las autoridades electorales parecen preocupadas por reducir el número de los que no votan, y no las organizaciones políticas, o sea los partidos.
De todas maneras, se nos hace que en este 2013 el esfuerzo del IETAM traerá una buena concurrencia a las urnas.
Así se entiende si consideramos que es un fenómeno cíclico, cada tres años.
El dato agrega que en el proceso del 2010 votaron el 46 por ciento de los dos millones 484 mil empadronados.
En el 2007 acudieron a las urnas el 48.7 por ciento de los ciudadanos empadronados y más antes, en el 2004, la cifra alcanzó el 51 por ciento.
De igual manera está confirmado que en los procesos locales vota más gente que en los federales. Les interesa más quien queda de alcalde que de diputado federal.
Así pues, es el tricolor el partido favorito para los comicios de este domingo siete de julio. A como están los pronósticos no se llevará el “carro completo” pero sí las posiciones suficientes para gobernar a la inmensa mayoría de la comunidad tamaulipeca.
Alguien decía que, el partido que obtenga mayoría el domingo, prácticamente tendrá asegurada la gubernatura en el siguiente sexenio. Y no hay duda que así será.
En otro tema, el rector José Ma. Leal Gutiérrez y sus colaboradores están dedicados a la preparación del examen CENEVAL que se aplicará el próximo jueves once de julio a los aspirantes a nuevo ingreso de todo el sistema de nuestra máxima casa de estudios.
Se realizará de manera simultánea en los planteles de los ocho centros universitarios y en las unidades académicas de educación a distancia.
Para el 19 el personal de la Universidad saldrá a gozar de sus vacaciones de verano, lo mismo que el gobierno del estado y los municipios.
El cabildo victorense que preside Miguel González Salum aprobó este martes donar 50 lotes al mismo número de empleados sindicalizados del municipio.
