Cd. Victoria, Tamaulipas.- Por infundadas e inoperantes, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación dijo “garrotazo” a las tres impugnaciones presentadas por el PRI para tratar de recuperar los distritos de Reynosa, Río Bravo y Matamoros, y confirmó los triunfos de los candidatos del PAN.
Fuera de cuatro casillas anuladas en Matamoros, donde se le concedió la razón al tricolor, los magistrados de la Sala Monterrey declararon infundados todos los argumentos y pruebas del Revolucionario Institucional.
En el distrito IV quedaron anuladas las casillas 548 básica; 555 contigua 1; 631 básica y 631 contigua 1, pero no fueron suficientes para modificar los resultados a favor de Carlos Alberto García González, el candidato ganador de Acción Nacional.
Los magistrados solo reconocieron las pruebas del PRI, en el sentido de que diversas personas que fungieron como directivos en las casillas, no aparecían en el respectivo padrón, como Rosendo Alvarado Flores, Martha Ibarra Sánchez, Jesús Martínez Turrubiates y Agustín López Morales. Por eso se anularon.
En los tres juicios de inconformidad, el tricolor argumentaba que el Instituto Federal Electoral fue el causante de que los ciudadanos votaran simultáneamente por el PRI y su asociado el Verde Ecologista, por lo cual se le anularon los sufragios.
Tan solo en Matamoros, los abogados del Institucional alegaban que cinco mil 359 ciudadanos sufragaron por los dos partidos y reclamaban para si la votación.
Pero los magistrados consideraron que “el partido actor también fue causante de tal hecho” por ser corresponsable en la participación democrática.
Tampoco sería posible determinar, señala la resolución, cuantos votos se le adjudicarían al PR y cuantos al Verde, si van en una coalición parcial (solo Presidente de la República).
TAMBIEN ES CULPA DEL PRI: MAGISTRADOS
De igual forma en el II distrito, cabecera en Reynosa, el TRIFE desestimó los agravios de los priístas como echarle la culpa al órgano electoral por no orientar debidamente a los ciudadanos para emitir su sufragio.
-Es infundado –el agravio- porque la obligación de orientación y capacitación cívica no es una actividad que corresponda en forma exclusiva al IFE sino que también compete a los propios partidos políticos.
Otro argumento tricolor era que 17 casillas fueron instaladas en lugar diferente al que se programaron, en tanto que en otras la recepción de los votos se hizo por parte de personas no autorizadas.
A esto, el Tribunal afirmó que no hubo tal cambio de domicilio y acusó que el PRI no aportó nombres ni información de esas “personas no autorizadas” en 239 casillas.
Establece la resolución que “eso es inoperante porque el actor (el PR) omite señalar los nombres de quienes fungieron de manera irregular”.
Uno a uno los magistrados fueron desechando las pruebas de los tricolores, como el de reparto –por otro partido- de bienes materiales a los electores como coacción del voto.
La “prueba” que presentó el Revolucionario Institucional, dicen los magistrados, fue una nota periodística, “lo que resulta insuficiente”.
En el caso del III distrito, Río Bravo, el principal agravio presentado por los priístas era la falta de orientación del IFE hacia los electores para que cruzaran solo el emblema de un partido.
-La postura es infundada. El PRI debió asumir una posición de orientación hacia sus simpatizantes desde el momento en que decidió contender en el esquema de coalición parcial.
Finalmente la resolución reitera que los votos emitidos a favor del PRI y Verde al mismo tiempo, seguirán siendo nulos y el ganador de la contienda es el candidato del PAN.
Además de los tres distritos en que se inconformó el PRI, los magistrados resolvieron el caso del VII distrito, Madero, donde había dos recursos, uno del PRD y otro del Movimiento Progresista.
En el primer caso, los perredistas pedían la anulación de la elección en 490 casillas, a lo que los magistrados resolvieron:
-Es infundado el presente juicio (JIN-35/2012) y se desestima la nulidad de la elección de diputado federal.
Por lo que hace al juicio SM-JIN-14/2012, presentado por el Movimiento Progresista, el Tribunal simplemente lo desechó por improcedente porque se presentó fuera del plazo que señala la Ley.
De esa forma, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Sala Monterrey, confirmó los triunfos de los candidatos del PAN en cuatro distritos de Tamaulipas: II, Humberto Prieto Herrera; III, José Alejandro Llanas; IV, Carlos Alberto García González, y VII, Marcelina Orta Coronado.
Perdieron los priístas (en el mismo orden) Reynaldo Garza Elizondo, Gabriel de la Garza Garza y Yanín Zaleta García Delgado, y en el VII el perredista Genaro de la Portilla Narváez.