Cd. Victoria, Tamaulipas.- Faltan poco menos de siete meses para los comicios federales y la tendencia general es que, después de 12 años, el partido tricolor reconquistará la Presidencia de la República.
Pero a nivel doméstico, en Tamaulipas ¿qué es lo que pasa?.
Si vamos por partes, hay que decir que el Revolucionario Institucional, en la última elección presidencial en tierras cuerudas, obtuvo el tercer lugar en clientela electoral.
Vamos: En los dos últimos procesos para renovar el ejecutivo federal, el PRI fue desplazado del primer lugar que mantuvo por largos años.
En el año dos mil, los tricolores vieron como los panistas conquistaban 521 mil 400 votos, mientras ellos se quedaban con 445 mil 700.
El otrora invencible fue desplazado al segundo lugar de la clientela.
Pero en el 2006, el Revolucionario fue enviado al sótano de las tres principales fuerzas políticas de la entidad.
Los azules se llevaron el 41.29 por ciento de los votos y los perredistas el 26.47, enviando a los priístas al tercer lugar con el 25.9 por ciento.
Claro, en las cifras están incluidos los votos de las coaliciones encabezadas por los tricolores y los amarillos.
Fue un golpe mortal para los revolucionarios (dicen que se conjugó una traición desde Palacio de Gobierno).
Fue tanta la debacle tricolor que perdieron las senadurías de mayoría, con lo cual se le truncaron los sueños por la gubernatura a José Manuel Assad Montelongo.
En resumen, el PRI es la tercera fuerza electoral en Tamaulipas en comicios de Presidente de la República y Senadores.
Pero ya en el 2009, en la elección federal intermedia, El Negro Gamundi le dio a su partido, el PRI, el 50 por ciento de la votación y mandó a los azules al segundo lugar con apenas el 30.9 por ciento.
Hoy, parece que los tiempos cambian y nuevo aires soplan a favor de los priístas.
Las predicciones dicen que son los tiempos del PRI.
El dirigente estatal, Lucino Cervantes Durán, terminó la limpia y reactivación de esa estructura que había perdido el ánimo para ir a las urnas.
Encuestas de intención del sufragio siguen favoreciendo a Enrique Peña Nieto y su partido, con poco más del 50 por ciento (Mitofsky), en contra de un 25 de los azules.
Durante el fin de semana, el Gobernador Egidio Torre Cantú se reunió con la estructura de su partido (PRI) en Victoria, y su emitió su pronóstico:
-Tenemos un partido fuerte, un partido que, como bien se dice, es la fuerza de México.
Y Egidio no se equivoca: El PRI ganará la Presidencia y Tamaulipas ya va trepado en el trailer peñanietista
Lucino ha hecho su chamba, la chamba que le encomendaron, y ha renovado ya la estructura desde Tampico a Nuevo Laredo.
En su última chamba tomó la protesta al dirigente municipal de la CNOP en Victoria, que estará a cargo de Dámaso Anaya Alvarado.
Ahí, Cervantes les dijo a los asistentes:
-Hemos visto un interés creciente, un gran entusiasmo en los compañeros. Si seguimos así, y sobre todo si sigue prevaleciendo la unidad, vamos a triunfar en las próximas elecciones y vamos a reconquistar la Presidencia de la República, de igual forma vamos a tener mayoría en las 2 cámaras.
No se equivoca: Después de 12 años, las predicciones del sufragio le dan la delantera a su partido.
El pronóstico es que, a partir del uno de julio el PRI será la primera fuerza electoral en Tamaulipas.
Esto sería tan solo por la estructura del partido y la simpatía de su precandidato, porque luego están los pleitos intestinos de los contrincantes, o sea los panistas y perredistas, lo cual es harina de otro costal.
Cambiando de canal, mire que la chamba de profesor oficial, viene siendo como la de cualquier otro mortal de la burocracia, y por tanto sin gozar de privilegios.
Por eso no debe estañar que, grupos y sectores de la sociedad, pidan que se audite a esos profes si son viciosos o no.
Cobran su sueldo de la lanita pública, y mire que no es cualquier cosa, muchos se sirven con la cuchara grande.
No obstante que se deben a la nómina pública, mire que no pocos pusieron el grito en el cielo cuando la diputada panista Beatriz Collado Lara preguntó –no le solicitó, que quede bien claro- al jefe de los profesores, Diódoro Guerra Rodríguez, si estaría de acuerdo en aplicarles un examen toxicológico.
El propio hombre de Guardaos de Arriba no estuvo de acuerdo y así se lo dijo a la Collado en la sesión de la Comisión de Educación del legislativo estatal.
Claro que la panista se refería no solo a examen sobre consumo de drogas sino también de alcohol.
Y es que mire usted, hay miles y miles de profes que le pegan duro a la corcholata y hasta se presentan en estado burro a dar sus clases a los niños.
Es evidente que ya son pocos los que “se la truenen” antes de ir al aula, pero no son pocos los borrachos consuetudinarios (o su itinenario).
Es lógico que, si en el gobierno del estado, tanto el sindicato como el patrón mantienen una jornada de rehabilitación de los acohólicos, la misma debe alcanzar a quienes cobran en la SET.
Sería más saludable, porque ¿cuántos son los profes que toman todos los días?.
Y que no se agreda a la señora Collado; ella no pidió los exámenes, solo preguntó a Guerra Rodríguez si estaría de acuerdo.
Mejor nos vamos por ahora.