«LOS CHAPULINES…»
Lic. francisco Javier Álvarez de la fuente
El chapulín (del náhuatl chapōlin, de chapā(nia) rebotar y ōlli hule, “insecto que brinca como pelota de hule”), es el nombre de algunos insectos ortópteros nativos de México y Estados Unidos. Esto según lo describe Wikipedia la enciclopedia libre.
Pero en el argot político se le denomina a aquellas personas hombres o mujeres, que habiendo sido electas para un puesto electoral antes de concluir el período para el que fueron designadas, ya están que comen ansias para buscar un nuevo puesto.
Tamaulipas es un estado donde abunda éste tipo de fauna, ya que los hay que si fueron electos como regidores, ya están buscando ser Diputados Locales y eso porque no pueden ser al periodo siguiente Presidentes Municipales sino eso lo buscaban, también los hay que si son Presidentes Municipales o Diputados Locales buscan la Diputación Federal, y los Diputados Federales y uno que otro Presidente Municipal o Diputado Local, un escaño en la de Senadores, solo que como en éste último puesto está muy limitado, también los tiradores son contados con los dedos de una mano y ésta es la del Gobernador en turno.
Así que aún y cuando diga lo contrario el Presidente del PRI estatal Lucino Cervantes, quien palomea la lista lo que verá, si otorga el ansiado visto bueno, será la garantía de sufragios cautivos que tengan los aspirantes.
Porque en esta elección, el Partido Revolucionario Institucional le apuesta al éxito y para ello necesita del mayor número de votos y no como piensan otros que le tienen puesta la mira al «efecto copete», si por ahí finalmente se decide la candidatura.
Por otro lado en la cancha del PAN, también se dan los chapulines y en Victoria tenemos un ejemplo palpable y conocido de todos y que no tiene caso ni mencionar su nombre; en cuanto a que en este caso n contarán ni con el «efecto Fox», ni con el “efecto Calderón” y menos con el “efecto anti peje”, que hizo ganar cinco de 8 y dos senadores y al PRD, lo dejaron en ceros.
Son muchos los que se han apuntado para las diputaciones y para agarrar una senaduría o lo que les den, y se están moviendo muy fuerte para que quien acomoda las fichas en el tablero los vea y los tome en cuenta, algunos ya lo han manifestado abiertamente y ya levantaron la mano, otros aun no lo hacen a la luz pero en lo oscurito se mueven y se dejan ver por el distrito que pretenden atrapar o en el cargo que ostentan actualmente; pero vemos que a estas alturas no hay nada escrito para nadie. Lo bueno apenas viene y habrá que esperar a ver la forma como se llena el crucigrama electoral de Tamaulipas.
Por lo tanto, los aspirantes y suspirantes tendrán que seguir con el té o las pastillas para dormir y calmar los nervios. Es lo clásico en cada proceso electoral y el aspirar o ambicionar no resuelve nada. Otros factores lo determinan.
Desde hace algunos años en la LII Legislatura del Congreso de la Unión, presenté una iniciativa para impedir que quienes eran electos a Diputados, sean éstos Locales o Federales, Senadores, o Presidentes Municipales, antes de concluir su encargo, buscaran otra posición, ya fuera de elección popular o administrativa, y el argumento fue que si habían sido electos al desertar de ese puesto estaban defraudando a los electores que habían confiado en ellos, pero como muchos de los que integraban esa legislatura buscaron un nuevo puesto de elección, obvio es mencionar que no fue aprobada la misma y por ello seguimos sufriendo las consecuencias concretamente en Victoria y en Tamaulipas, pero para seguir luchando para que algún día se acaben los chapulines políticos no solo en Tamaulipas sino en todo México…¡Aquí estamos!