Por fin cayó uno, pero hay otros que piden cárcel a gritos.
Tantos fueron los ”borregos” sobre la aprehensión del ex alcalde tampiqueño, Oscar Rolando Pérez Inguanzo que, este lunes, cuando realmente se dio, había incredulidad respecto a la noticia.
Desde hace largos meses, los medios masivos lo habían detenido, enjuiciado y condenado a largos años de prisión por mil delitos.
Ahora no hay lugar a dudas, el hombre ya está en la cárcel, mas al parecer no por los delitos graves por los que se le debería de juzgar sino por algunos menores.
No obstante, en un análisis frío de la situación, la detención de algún funcionario relacionado con los delitos de peculado, urgía a la ya no tan naciente administración estatal.
Era ya urgente en el camino de la credibilidad y confianza ciudadana, y más vísperas de un proceso electoral que no se antoja nada fácil para los tricolores.
Sí, aunque suene difícil, priístas encarcelando a priístas, algo que no es nuevo.
Otras administraciones estatales se “avorazaron” en ese golpe de confianza ciudadana. Egidio lo dio a casi diez meses del inicio de su gobierno.
Veamos.
Tan solo entró la administración de Manuel Cavazos Lerma y fue a dar a la cárcel uno de los hombres de confianza de su antecesor, Américo Villarreal, como lo fue Víctor Manuel Márquez Gatica. ex jefe de lo que se llamó Sistema Para la Integración de la Población al Desarrollo Urbano (SIPOBLADUR).
Más tarde fue remitido al penal el ex Director de Gobierno, Pedro Silva Rodríguez, acusado de vender juegos de placas de sitio en Altamira.
Y antes de irse, Cavazos desaforó y envió al penal de Andonegui a Juan Genaro de la Portilla, ex alcalde de Altamira y en ese tiempo diputado local.
En la administración de Tomás Yarrington fue enviado a prisión el poderoso cavacista Pedro Hernández Carrizález, ex jefe de obras públicas y Sedesol.
Varios ex alcaldes fueron a parar a la cárcel, o huyeron, como Gerardo Higareda Adam, de Reynosa, quien jamás fue alcanzado por el largo brazo de la Ley (o no se quiso).
Así que no hay que “admirarse” de la captura de Pérez Inguanzo, si otros ex presidentes municipales como Juan Toral Medoza, de Llera, también pisaron el fresco ”bote”.
Y ahí estuvo el ex de Madero, Mario Sosa Pohl, de extracción perredista por cierto, y Fernando Pedraza Chavarri, de Acción Nacional.
En cambio, en el gobierno de Eugenio Hernández Flores no se dio eso que en política se denomina “golpe de credibilidad”. No hubo ex funcionarios encarcelados.
Que se recuerde, hasta el sexenio de Enrique Cárdenas González los alcaldes bandidos retozaban en el presupuesto sin que alguien les dijera algo.
A finales de la administración de Américo Villarreal fue enviado a prisión, por peculado, el ex presidente de Soto la Marina, Teodoro Herrera Sosa.
En fin, es evidente que ya urgía, hacía falta el encarcelamiento del ex alcalde que carga el estigma de la corrupción.
Pero ojalá y no lo enjuicien por nimiedades como esa de pagar cirugías plásticas de busto de dos damitas amigas suyas con recursos de la Tesorería de Tampico, sino por las grandes sumas que se llevó.
Solo habrá que confirmar que la Procuraduría elaboró bien las averiguaciones para que no haya pronta libertad.
Porque debe saber usted que, todos los anteriormente señalados, se fueron “limpiecitos”, sin culpa y absueltos de toda sospecha de delito.
No sería correcto que, transcurrido el proceso eleccionario federal, el señor Pérez vuelva a la libertad para refugiarse en los Estados Unidos donde tiene su residencia.
Ahora bien, cabe preguntar ¿cuántos ex alcaldes faltan? Porque se sabe que otros están pidiendo la cárcel a gritos, como Arturo Díez Gutiérrez que lo fue de Victoria, Ramón Garza Barrios, de Matamoros, y Héctor López González, de Mante, todos durante el anterior sexenio.
En otros asuntos, este lunes el Gobernador Egidio Torre se hallaba en la ciudad de México dialogando, gestionando con los diputados federales los presupuestos para Tamaulipas en el ejercicio 2012.
Como sabe sabe, cada Gobernador recibe una fecha para concurrir con su equipo de trabajo y una lista de obras prioritarias que, se sabe, las de Egidio son carreteras.
En otro tema, en Matamoros se reunió el dirigente estatal del tricolor, Lucino Cervantes Durán, con los jerarcas nacionales del Instituto Político Empresarial (IPE) que encabeza Rafael Ranero Barrera.
Le tomaron al protesta a los representantes del IPE en Miguel Alemán, Camargo, Díaz Ordaz, Guerrero y Matamoros.
Aparte, mire que en Tamaulipas las ferias del empleo han dado buenos resultados para combatir la falta de chamba.
Es por eso que, bajo la organización del gobierno estatal, este 19 de octubre se efectuará la IV feria regional en Nuevo Laredo; la V será en Tampico el 27 del mismo, y el tres de noviembre en Reynosa la VI edición.
Y mientras el PRI anda en la chamba, los azules se dividen cada día más.
Ya están en la Comisión de Orden, para ser expulsados, Andrés Cruz Amén y Lina Santillán Reyes, esta todavía presidenta de comité municipal de Victoria.
En cuanto le den “puntilla”, la mujer deberá retirarse de la presidencia del CDM capitalino.
Nos retiramos.