Cd. Victoria, Tamaulipas.- Pues mire que en su reciente visita a Jaumave, el Gobernador Egidio Torre Cantú recibió dos denuncias ciudadanas a las que ordenó (a sus colaboradores) poner muchas atención.
Una es que se investigue a la jueza Tranquilina Martínez Balderas –Segundo de Adolescentes en ciudad Victoria-, por haber dejado en libertad “por falta de pruebas” a un menor acusado de un homicidio con agravantes.
La Tranqui apenas tiene unos meses en la chambita y al parecer su experiencia es en los tribunales agrarios y no en la administración de la justicia para menores infractores.
Por cierto, en una valoración a su desempeño, el Tribunal de Justicia le dio una “extraordinaria” calificación de 58.7 porque parece que la mujer no da el ancho.
En puntualidad y permanencia le asignaron una calificación de 7.5 (debe estar de ocho de la mañana a cuatro de la tarde, pero al parecer llega con la fresquecita de las once); en resoluciones dictadas a tiempo un 6.25 y así sucesivamente.
Por ejemplo, de 26 acuerdos que ha dictado en el tiempo que lleva en la nómina de Alejandro Etienne Llano, tres los ha emitido a destiempo y sin justificación.
El muchacho liberado acredita 17 años y mató a un primo de 25. Por decisión de la jueza no pisó la llamada “Granja de Guemes” y eso ocasionó una protesta ante el ejecutivo.
El Gobernador giró la instrucción y ese es un asunto que resolverá el señor Etienne y los consejeros de la Judicatura.
Una segunda denuncia, esta más trascendente porque afecta a miles de habitantes de la región semiárida, se refiere a que por pleitos tontos internos del sector salud, en el Hospital Regional Integral de Jaumave no hay médico los fines de semana y menos por las noches.
Los miembros del comité campesino le indicaron al que tiene el mando que en aquella región está “prohibido” enfermarse sábados y domingos, y menos por la noche.
El asunto es delicado y se agrava porque en el Hospital hay personas enfermas internadas que pudieran sufrir recaídas.
Expresaron los líderes que el temor es que, de esos enfermos, un día “pudiera irse uno” –o sea morir- por falta de médico.
Dijeron que el tema ya se le había planteado al jefe del sector, Norberto Treviño, pero nada de nada.
La falta de atención proviene de un pleito interno de poder y billetitos en el Regional.
De Victoria mandaron como director a un jovenazo de nombre Martín Segura Chico, quien llegó con el interés de mejorar los servicios, de poner a chambear a quienes cobran en la nómina.
Pero se topó con el cacique de siempre, el responsables de todos los males, que se llaman Eligio de la Cruz González, el subdirector.
Este ordenó que los fines de semana todo el mudo descanse y prohibió al pueblo enfermarse de algo.
Su proyecto lleva chanfle: El despido a Chico y la integración de una llamada Tomasa Valdez de Jesús como nueva directora.
Ella se encuentra en la Jurisdicción Sanitaria No. 8 (en el mismo edificio) y junto con Eligio hacen y deshacen aprovechando que Martín se tiene que ir a dormir a Victoria y ellos viven en el pueblo.
El asunto interno no le interesa a los campiranos, pero ¿y si un día hay heridos? ¿y las mujeres con parto? ¿y las enfermedades naturales?.
Un día fue “el jefe” fue por allá de vacaciones pero solo a recordar cuando hace más de 60 años hizo su servicio social por esos rumbos. No le puso solución al asuntillo.
En otro tema, mire que el pleito interno de los panistas no parece tener solución a la vista. El edificio estatal seguía tomado y la negociaciones para desalojarlo marchan a paso de tortuga.
Lo que puede ocurrir es que, una vez más, la dirigencia nacional suspenda la elección del nuevo dirigente en Tamaulipas, programada para los primeros de septiembre.
Se sabe que los “cabecistas” presentarán como candidata a María Eugenia de León, ex presidenta municipal de Valle Hermoso y ex diputada local, en tanto que los “sierristas” traen como gallo a Edgar Vargas Arizavalo.
Por el lado de Garza de Coss, él mismo está empeñado en la reelección y, si no queda él, otro de sus cuates o bien Lázara Nelly González Aguilar.
Los respectivos bandos han presentado sus querellas ante la Procuraduría de Justicia acusándose mutuamente de muy diversos delitos, incluyendo asociación delictuosa ¿qué va a suceder? Lo veremos.
Aparte, nos dicen que el jefe de Educación, Don Diódoro Guerra Rodríguez, es tan celoso de los intereses de su secretaría, que ya ordenó bardear la llamada “Torre de Cristal” que será ocupada única y exclusivamente por la SET.
Se habla de la instalación de retenes en los accesos permitidos y estrictas medidas de seguridad internas.
Y bueno, se aplaude la medida del señor, no vaya a ser que los bandidos le plagien los “cerebritos” que tiene alojados en la torre.
Guerra se quiso quedar con el personal de mantenimiento del edificio, incluyendo a los jardineros, pero no le gustó cuando le dijeron que tenía que liquidarlos conforme a la Ley, para comenzar una nueva relación laboral.
Mejor nos vamos por ahora, no sin antes mencionar que, a golpes, los aspirantes a la dirigencia de la sección 30 se van eliminando uno a uno.
Como se dice entre el populacho, al final solo quedarán “los buenos” y los belicosos se irán a sus casas.
Nos retiramos por ahora.