Cd. Victoria, Tamaulipas.- Quiso revolucionar la educación: Eliminó a los directores de las escuelas, acabó con los periodos de vacaciones «grandes» y suprimió los molestos exámenes de evaluación para los alumnos.
Llegó a este mundo el 23 de mayo de 1882, pero falleció muy temprano, cuando cumplía los 46.
En uno de los pasajes desconocidos de su vida, se habla que fue un agitador revolucionario al que Don Porfirio encarceló en San Juan de Ulúa.
De Tamaulipas huyó para no ser asesinado por los enemigos del Gobernador Luis Caballero, quien lo había hecho titular de educación en el estado.
Mucho se habla de la labor educativa de Lauro Aguirre Espinoza, pero pocos saben del contenido, las acciones que realizó.
La doctora María del Carmen Olivares Arriaga publicó trascendentes documentos en el «Informe General de la Educación Pública en el Estado de Tamaulipas 1914-1916, Maestro Lauro Aguirre».
Fue un reformador, pero sus ideas no pudo completarlas en Tamaulipas dado que apenas estuvo un tiempo como titular de educación, designado por el efímero gobierno de Caballero.
De aquí se habría ido huyendo al centro del país hasta que llegó a la ciudad de México, donde más tarde fue designado director de la Escuela Nacional de Maestros, que él fundó unificando tres normales que entonces había.
Fusionadas ya, fue el primer director y, como tal, se le recuerda con un monumento en la capital.
Por cierto, fue el creador de la primera escuela al aire libre que hubo en México.
Es la Escuela de la Fronda que, según sus biógrafos, funcionó en el Paseo Méndez de ciudad Victoria, pero también fracasó.
Si Don Lauro hubiera permanecido como jefe de educación en el estado, seguramente en nuestros días no existieran cerca de seis mil plazas de director.
QUERIA MENOS VACACIONES PARA LOS MAESTROS
La maestra Olivares menciona en su obra los puntos fundamentales de la reforma de Don Lauro, que él mismo habría escrito en 1917.
1.- La escuela primaria debe instalarse al aire libre
2.- No son necesarios los directores. La responsabilidad de la labor quedará en manos de los profesores y de grupos que tomarán sus decisiones en conjunto.
3.- Los programas de estudios desaparecerán para dar lugar a otros menos rígidos.
4.- La escuela primaria debe aumentar sus años de estudio
5.- Los horarios deben ser flexibles
6.- Las vacaciones generales deben modificarse reduciéndolas e instituyendo descansos cortos y frecuentes durante el año.
7.- Los grupos escolares deben ascender a un mínimo de 25 alumnos.
8.- La escuela debe poseer campos de cultivo, animales para su cría y cuidado, baños, campos deportivos, bibliotecas, museos, talleres.
9.- Por cada número determinado de escuelas, de ocho a diez, se fundará un centro infantil.
10.- Juntas de maestros, médicos, padres de familia y autoridades civiles sustituirán a los actuales directores de educación primaria.
11.- Los niños retardados y normales recibirán educación separadamente para que todos aprovechen en la medida de sus posibilidades.
12.- La escuela debe suprimir los exámenes y realizar sus promociones en relación a un registro minucioso que llevarán los maestros de cada niño.
Don Lauro Aguirre se adelantó a su tiempo pero vivió muy poco.
Si sus ideas hubieran prosperado, seguramente la educación tendría otro nivel no solo en Tamaulipas sino en todo México.
Además de eliminar a los directores y de reducir las vacaciones, el profesor Aguirre buscaba que las escuelas se vincularan directamente con la comunidad, que los padres las sintieran suyas.
Instituyó entre otras cosas.
Comisiones de Vigilancia.- Durante su función como director de educación en el Estado se crearon organismos colegiados en todos los municipios, que eran auxiliares de origen popular para beneficiar y contribuir a la superación del trabajo escolar.
Allí se tomaban las decisiones más importantes para las escuelas.
Los representantes se designaban en juntas escolares a través del sufragio directo de los mismos padres de familia.
Conferencias pedagógicas.- Estas se organizaban en cada escuela las tardes de los miércoles y sábados, donde los involucrados tenían derecho a participar y opinar.
Programas de cultivos.- Los programas de estudios incluían fomentar el amor por la naturaleza, cultivar los jardines, sembrar la tierra en todas las escuelas.
PRESO EN SAN JUAN DE ULUA
De acuerdo con el Diccionario Histórico y Biográfico de la Revolución Mexicana, Don Lauro estuvo preso en el Castillo de San Juan de Ulúa, Veracruz, a donde Don Porfirio mandaba a sus enemigos políticos.
Aunque ahí está su contenido, hay personas que indican que no fue así y que, en Chihuahua, existió otro Lauro Aguirre Espinoza quien ciertamente estuvo encarcelado.
Según esto, después de 1904, cuando se tituló de profesor, Lauro se rebeló en contra del gobierno y tuvo que salir huyendo hacia El Paso, Tx, donde dirigió el periódico La Reforma Social, órgano propagandístico del Partido Liberal Mexicano.
También habría dirigido el periódico El Progresista.
Y en 1906, junto con los hermanos Flores Magón, Antonio I. Villarreal, César Canales y Prisciliano Silva, planeó un levantamiento armado en contra del General Díaz, el que arrancarían en la frontera.
O sea que, ellos, se estaban adelantando cuatro años al levantamiento de Madero.
Tenían planeado tomar Ciudad Juárez con fecha 21 de octubre de ese 1906.
Pero varios días antes de que se diera la citada rebelión, Lauro Aguirre Espinoza fue detenido por el Servicio de Inmigración de los Estados Unidos y por detectives de una asociación particular, con lo cual quedó frustrada la rebelión.
También quedaron presos varios de sus compañeros, como Antonino I. Villarreal y José Cano.
Como la inmensa mayoría de los conspiradores en contra del régimen de Don Porfirio, Lauro Aguirre fue encarcelado en el penal de San Juan de Ulúa, Ver.
Al caer el gobierno de Caballero, por ponerse en contra de Carranza, Lauro huyó para no ser detenido. Pero no corrió la misma suerte un profesor Alfredo Uruchurtu, que él había traído de la capital.
En ese huir, Aguirre fue a dar a Guanajuato, donde tuvo a su cargo el sistema educativo en 1919.
Finalmente fue a dar al Distrito Federal, donde fundó la revista Educación, y a partir de 1921 ingresó a dar clases en la Normal Nacional.
Para 1923, ya estabilizado el país, lo tenemos como Director de Enseñanza Primaria a nivel nacional.
Un año después, ya es Director de la Escuela Nacional de Maestros, la que integró con la fusión de la normal de profesores, de profesoras y la escuela nocturna Pino Suárez.
Don Lauro falleció a muy temprana edad el cuatro de junio de 1928.
Hay muchos datos oscuros sobre la vida de Aguirre.