Luis Lauro Carrillo
PARALISIS GUBERNAMENTAL POR VACACIONES
La actividad gubernamental de Tamaulipas quedó paralizada, con motivo del primer periodo vacacional que disfrutaran los más de 15 mil burócratas estatales, mismo que inició el 18 de julio para retornar el primero de agosto del presente año, contando las dependencias con las guardias respectivas durante el asueto.
Cabe preguntar ¿Tiene sentido que un gobierno entero se pare por vacaciones? La respuesta es no, porque no se interrumpirían las labores burocráticas en los centros de trabajo de las dependencias gubernativas, lo que incrementaría la eficiencia y productividad del aparato estatal.
En ese tenor, Jorge Abrego Adame secretario de administración habrá que reflexionar sobre la modernización del actual sistema vacacional del gobierno del estado, para sustituirlo por otro más flexible como el de las vacaciones escalonadas, sin la rigidez del tan común “cerrado por vacaciones”.
En efecto, el sistema vacacional escalonado trae consigo más ventajas y beneficios tanto para los particulares gobernados, como para los servidores públicos y la economía en general.
En los hechos quien tenga la necesidad desarrollar un proyecto productivo o cumplir con algún trámite administrativo o fiscal, solicitar una licencia, un permiso, una autorización, una concesión, tienen la limitante encontrar las oficinas de gobierno cerradas por vacaciones, amén de que los funcionarios de guardia no cuentan con capacidad de decisión para resolver los asuntos administrativos.
En teoría la administración pública centralizada y paraestatal está integrada por un cuerpo profesional de servidores públicos organizados en una pirámide jerárquica que operan bajo normas, reglas sistemas, procedimientos, políticas, hábitos y costumbres que le dan estructura al aparato administrativo, llamado burocracia.
No pasa inadvertido que el actual sistema de administración de personal ha sido diseñado por ley para frenar la acción gubernamental dos veces al año por las vacaciones de los servidores