Enrique Cárdenas González, entonces Gobernador del Estado, lo tiene bien presente:
-El Tecnológico de Victoria nació en una tarjeta y con una firma.
Claro que la firma tenía validez, pues era del Presidente de la República, Luís Echeverría, y la tarjeta había sido elaborada por el propio Enrique.
Con el documento, ya autorizado por Echeverría, el Gobernador se presentó con el secretario de Educación, Víctor Bravo Ahuja.
-Ya vienes otra vez tú…, le dijo a manera de reproche.
-Sí, vengo otra vez con mis tarjetitas del señor Presidente, para poner más escuelas en Tamaulipas.
Así nació el Instituto Tecnológico Regional de ciudad Victoria, cuyas labores académicas arrancarían el 15 de octubre de 1975.
Por instrucciones presidenciales, fue el nacimiento más rápido de una institución, lo mismo que la construcción de los edificios propios.
A casi 36 años de distancia, Cárdenas manifiesta:
-Tengo muy presente que estuve en la graduación del Cecyt 104 (hoy Cebetis 24), donde los jóvenes tenían la inquietud de seguir estudiando y me pidieron un tecnológico.
El Gobernador se llevó la petición y gestionó de inmediato.
-Luís Echeverría siempre me autorizaba y cuando se trataba de estas escuelas con mayor razón.
Y agrega:
-Me llevé una tarjeta a la ciudad de México, como acostumbraba presentarlas al Presidente, y me autorizó de inmediato, se acordaba de que de niño estuvo en Victoria.
El tecnológico arrancó 45 días después de que inició labores todo el sistema educativo, pero recuperaron el tiempo al siguiente semestre.
ARRANCA CON DOS INGENIERIAS
El primer director de la institución fue Miguel Zepeda Sánchez, químico industrial egresado del Politécnico Nacional.
Procedente del Tecnológico de Madero, fue enviado exclusivamente a fundar el de Victoria, con la instrucción de regresar a su base.
Pero de entonces ya transcurrieron 36 años y se quedó en definitiva en Victoria.
Señala que la escuela arrancó con cuatro grupos de las carreras de ingeniería Civil e ingeniería Industrial, utilizado aulas prestadas del Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos, como se llamaban antes los Cebetis.
Por la época, se acostumbraba que las instituciones tecnológicas funcionaran juntas: Secundaria, preparatoria y profesional.
Pero Victoria fue el primer Tecnológico que funcionaría de manera independiente a nivel nacional, como hasta la fecha trabajan.
En ese 1975 nacieron diez tecnológicos en todo el país. El de Victoria fue el último autorizado, y fue directamente por la firma de Echeverría.
Arrancaron las clases con 149 alumnos y 22 profesores, dice Zepeda, y todo se hizo «conforme a las de la Ley», es decir hubo examen de admisión y de oposición para los catedráticos, de tal forma que ingresaron los mejores estudiantes y se contrató a los mejores profesores.
-Fuimos el primer Tecnológico que inició sin bachillerato; ahorita ya ninguno tiene, manifiesta el ex director.
No tuvieron problemas para encontrar maestros, pues había técnicos de la CFE, de la SCT, del gobierno del estado y de la universidad de Tamaulipas.
-Yo venía de Madero y la instrucción era echar a andar el Tec y que me regresara, indica Miguel Zepeda, quien sigue en la institución en ciudad Victoria.
En esta capital había un patronato para buscar la apertura del Tecnológico, y se buscaba que la gente que ingresara fuera institucional y no recomendados, por lo cual se prefirió nombrar a un director foráneo.
-La ventaja es que entró mucha gente adulta, hasta casados, y otros que estudiaban fuera, como México y Monterrey, manifiesta Zepeda.
TRABAJARON SABADOS Y DOMINGOS
Los demás tecnológicos el país habían iniciado clases el uno de septiembre, en tanto que el de Victoria arrancó el 15 de octubre.
Para recuperar el tiempo perdido, maestros y alumnos tuvieron que trabajar los sábados y domingos y días festivos.
En lugar de terminar el semestre en enero, culminaron hasta febrero, tuvieron una semana de vacaciones y volvieron a las aulas.
Dice Miguel Zepeda Sánchez:
-Siento que en la apertura del Tecnológico se vio el afecto de Echeverría por Victoria, pero también el poder y la influencia de Enrique Cárdenas.
Todo fue muy rápido:
-El gobierno del estado le compró el terreno a la familia Salazar y, al año siguiente, en 1976, empezó la construcción del edificio, indica Cárdenas González.
Es más, un día antes de que Echeverría dejara el poder, se entregó al Tecnológico la primera etapa de los edificios, además de un autobús de transporte foráneo.
La última visita del presidente fue a Tampico, a donde concurrieron maestros y estudiantes del Tecnológico de Victoria.
El entonces gobernador los apoyó para viajar al puerto.
-Adelante, váyanse rápido porque sino no alcanzan, les dijo.
La primera generación de estudiantes del Tecnológico de Victoria egresó en 1979.
En 1982 comenzó la carrera de licenciatura en Informática; en 1984 la licenciatura en Biología y 1988 las de ingeniería Electrónica e ingeniería Mecánica; Sistemas comenzó en 1997 y así sucesivamente hasta nuestros días.
