Cd. Victoria.- Conocedor de todos los “secretos” del PRI, el dirigente estatal Lucino Cervantes Durán se dispone a realizar los primeros movimientos tendientes a fortalecer a su partido.
En unos días hará la renovación del comité local de Nuevo Laredo, como el arranque de una lista de 23 municipios donde urge sangre joven.
Los viejos tricolores opinan que debe comenzar ya la “enaceitada” del revolucionario para hacer los preparativos rumbo al proceso electoral federal que viene.
Tal vez esta misma semana Lucino anunciará el nombramiento de delegados municipales hacia el cambio de las dirigencias y la reactivación en general de la estructura partidista.
Más tarde, el comité estatal deberá nombrar a los delegados distritales.
Hoy en el tricolor, como en el gobierno y los municipios, las actividades políticas permanecen “paralizadas”.
Hay elementos que por largos años han convertido la “operación” política como su fuente de ingresos. En la época están en la fría banca.
La mayor parte tiene plazas en el gobierno, en la SET o en organismos descentralizados.
Son los que hacen ganar al partido –cuando se necesita- y por tanto no se les puede exigir mucho para que cumplan con las plazas que tienen asignadas.
El hecho es que están “abandonados” desde que perdieron en Guerrero.
Tampoco saben nada de la “pisca” que les llegaba del directivo estatal.
Pues bien, al parecer la maquinaria comenzará su lubricación y por tanto el pago de la lanilla.
Lo que nos dicen que ojalá y el partido tenga “memoria” para el nombramiento de algunos de ellos.
Por ejemplo, que fue Homar Zamorano Ayala quien “empinó” Tampico a manos de los azules.
Otro que fue a morder el polvo es Carlos Sorel López Castro, comisionado en el 2010 en Nuevo Morelos.
Y no olvidan los auténticos tricolores que Abdíes Pineda Morín y Juan Alonso Camarillo eran delegados en Río Bravo, y se le debe construir un monumento por entregar el municipio a Diego Guajardo Anzaldúa, del PAN.
Abdíes ya es diputado local –primero en la plurinominal- y se menciona que el CDE es muy afecto a dar “comisiones” a los legisladores.
Es de esperarse que lo vuelvan a nombrar ¿en Río Bravo?.
Esos tricolores recuerdan a su dirigencia que, en San Fernando, hay una mujer que tiene una cola más larga que un tren carguero.
Se llama Martha Alicia Jiménez Salinas, diputada por cierto, quien dejó la víbora chillando por aquellos lugares.
Ya solo faltaría, se dice, que nombraran como delegada a esta mujer pese a las demandas penales que tiene por fraude.
Uno es el expediente 194/2008 y está radicado en el juzgado de Primera Instancia de Valle Hermoso por fraude millonario.
Otro expediente está en el de Primera Instancia de Matamoros con el número 2043/2007.
Por cierto, la dama ya anda en precampaña por la alcaldía de San Fernando donde tiene a sus principales enemigos (socios), a los que trincó tres melones de pesos provenientes de un apoyo de SAGARPA.
Pero también trincó a quienes le hicieron la chamba para crear una granja de camarón donde sus principales eran los empleados de Pesca del Gobierno del Estado, Felipe Razo y Rubén Trejo.
A la empresa El Mar de BM le trincó otros tres millones 400 mil pesos por la chamba de construir los estanques para los camarones, utilizando maquinaria pesada.
Fueron diez estanques de a tres hectáreas cada uno.
Total que la diputadita es toda una ficha y cuenteó a medio San Fernando y Valle Hermoso diciendo que generaría 45 empleos y exportaría camarón gordo a los Estados Unidos.
Se sabe que su “empresa” Los Gigantes de la Aquacultura, sigue además sin pagar la renta del terreno donde están los estanques, que es propiedad de la familia Guajardo Castañeda.
Pero este es otro asunto. Estábamos con los delegados y ”operadores” del tricolor.
La pregunta de nuestro informante ¿qué no habrá más elementos? Porque siempre salen –dice-, con que Librado Treviño Gutiérrez, César Saavedra Sánchez, Jorge Pérez González, Alías Ahuet, Felipe Salinas y otros.
Ah! y la ex diputada Norma Dueñas Pérez –esa que afanosamente busca entrar a la nómina egidista-, pues también fue a entregar el municipio de Aldama a las huestes panistas.
Por lo general el tricolor nombra como delegados a sus diputados locales, cuando varios de ellos son odiados en sus distritos.
El Revolucionario Institucional deberá tener precandidatos a las diputaciones y senadurías allá por enero o febrero del 2012, que en política es “a la vuelta de la esquina”.
Lucino ya está en eso, en el “afine” de la maquinaria para lo que pudiera ocurrir de aquí a diciembre cuando también se abre la presidencial.
Por cierto, en Victoria ha surgido un jovenazo de nombre Eduardo Abraham Gattas, que quiere ser dirigente del PRI local.
El argumento de sus amigos y promotores es que si Ricardo Rodríguez Martínez no sirvió para maldita la cosa, y el revolucionario no perdió en los comicios del 2010, Eduardo hará una brillante labor.
El hecho es que, si en los municipios de “provincia” son los alcaldes los que imponen dirigente tricolor, en la capital por lo general es el que el manda en el tercer piso del palacio forrado con cantera.
Mejor luego seguimos porque el espacio se acabó.