Cd. Victoria.- El Congreso del Estado abrió el juego para seleccionar a tres consejeros electorales del IETAM que deberán entrar en funciones en la primera quincena de marzo.
Tan solo de saberlo pone “chinito” el cuero ¿cuántos aspirantes se presentarán?.
No quisiéramos estar en el pellejo del presidente de la comisión legislativa, Antonio Martínez Torres, ni de su secretario Manglio Murillo Sánchez, que son los que lidiarán con la tropa de interesados.
Quien sabe por qué (no creemos que sea por los 60 mil pesillos mensuales sin hacer nada), pero la de consejero es una de las chambas más apetecidas entre quienes se consideran operadores políticos, asesores partidistas o “genios” de los procesos electorales.
En enero del 2010, por disposición de las nuevas leyes en la materia, se dio la renovación de los integrantes del IETAM y ¿cuántos cree usted que pidieron la chamba?.
La lista que tenemos es de 53 individuos e individuas que exigían llegar a la nómina del organismo.
El entonces presidente de la Comisión del Congreso, Guadalupe González Galván por poco y se vuelve loco dado que había infinidad de “influyentes”, entre ellos algunos periodistas.
De esos 53, Lupe logró deshacerse rápidamente de ocho argumentado que no reunieron toda la documentación.
Así, quedaron “vivos” 45 para dejar al final una lista de 21 que se someterían al pleno del legislativo para nombrar solo a siete.
Fue una labor titánica para los legisladores puesto que varios de los interesados en la chamba se creían “muy picudos” por haber desempeñado ya la chambita en años anteriores.
Para desgracia de los que buscaban la nómina, cuatro de los consejeros obtuvieron la reelección.
Tenemos la lista de todos los que suspiraban por 60 mil pesillos sin hacer nada, pero nos da pena publicarla.
También vimos con horror lo que ocurrió a finales del 2006, del proceso para que los diputados tuvieron la lista de los aspirantes a consejeros.
En esa fecha la propuesta solo podían hacerla los partidos políticos y no los individuos por voluntad propia.
Pero mire usted, la lista fue nada menos que de 31 aspirantes de los cuales 14 fueron a dar al Legislativo para hacer la nominación.
Pues bien, si hace un año los interesados fueron 53 ¿se imagina usted ahora?.
Como ya se publicó la respetiva convocatoria, el plazo para presentar la documentación es del 17 al 21 de enero, en un horario de nueve de la mañana a seis de la tarde.
Y por cierto, ahora no son siete sino tres consejeros, pero usted puede calcular la lista de buscachambas ¿le gustan cien, o 150? ¿acaso más?.
La lista de requisitos llega a 12, pero usted conductor de vehículos de motor debe tener mucho cuidado en la semana que viene, no sea que vaya a atropellar a algún aspirante a consejero electoral.
Ah!, pero hoy campea un criterio más sofisticado y es el de buscar solo uno o dos votos y que no son precisamente los de los diputados.
Esos votos estarían en las esquinas del poder en Palacio de Gobierno, allá en tercer piso.
Después de todo los diputados no sirven mas que para levantar el dedo y en ocasiones hasta lo hacen mal.
En resumen: Yo sigo pensando en que a los aspirantes los mueve un espíritu democrático y no centavero. No quisiera equivocarme.
En otro tema, mire que el próximo domingo se elegirá a los nuevos dirigentes del CDE del PRI en reunión del consejo político.
Sin embargo, los signos indican que todavía “la democracia” no toma la decisión respectiva.
Se mencionan varios individuos que podrían llegar, pero al parecer entre ellos no está el “bueno”.
La versión señala que el fin de semana se conocerán los nombres de quienes serán presidente y secretario general (o secretaria) para que voten por ellos los consejeros.
En tema diferente, para los críticos del ex presidente del CDE del señalado partido, Ricardo Gamundi Rosas, hay que decirles que antes de finalizar la pasada administración se otorgó un fíat de notario a uno de sus sobrinos consentidos, de Reynosa para variar.
El agraciado se llama Adolfo Noe Longoria Gamundi, y da la impresión que, como abogado, no está capacitado ni para sacar un borracho del bote con la multa en la malo.
El joven tiene 27 años, tres de titulado y ya lo hicieron notario. Es hijo de Elizabeth Gamundi Rosas ¿cómo la ve? (como decía la desaparecida colega “Cuquis” Garza).
El propio moreno es notario pero lleva nueve años con “permiso” porque tiene chamba en el gobierno, y no son compatibles.
Antes de irnos, mire que sigue atorado en el Congreso del Estado el reparto del pastel de las comisiones entre los 36 legisladores.
Parece que Doña Lupe Flores Valdez no ha llegado a consenso con los azules, que son la segunda fuerza. Aunque, después de todo, los tricolores tienen la aplanadora por el volante para hacer lo que quieran.
De los demás partidos, esos están domesticados, como los del Verde y la del Panal. Del perredista Juan Manuel Rodríguez, muy apenas sabe leer como para subirse a la tribuna (como lo demostró en la sesión de este miércoles) y tirar golpes.
Mejor nos vamos.