Cd. Victoria.-Le dimos una “revisadita” al proyecto de reformas y adiciones a la Ley de Administración Pública del Gobernador Electo, Egidio Torre Cantú, y mire que los cambios que busca son bastante sustanciales y no cualquier cosa.
Bueno, decimos que “busca” por llamale de alguna manera, porque los cambios serán aprobados este lunes por el pleno extroardinario del Congreso y públicados de inmediato en el Periódico Oficial para darles vigencia.
Aparte de la reestructuración de algunas secretarías, Egidio le dará una “megasacudida” a los organismos públicos descentralizados, empezando por el DIF estatal y algo que se denomina Administración de la Beneficencia Pública del Estado.
A partir del uno de enero, la empresa Desarrollo Integral de la Familia pasará a depender administrativamente de la SEDESOL.
Alguien debió hablarle al oido al Gobernador Electo que a través de los organismos descentralizados se estaban haciendo muy buenos negocios, porque habrá un reacomodo de la adscripción de los mismos y al parecer una coordinación general que dependerá de él directamente.
Y es que son cientos de empresas de ese tipo que representan un barril sin fondo, que no cumplen con el cometido para el que fueron creados y tampoco los audita el Congreso del Estado y su órgano superior, como es el caso también de las Comapas.
Según esto, el nuevo Gobernador se propone sectorizar los descentralizados que se han multiplicado como conejos en los últimos sexenios.
Egidio crerá lo que se llamará Instituto Tamaulipeco del Deporte y eliminará que el Instituto Tamaulipeco de Cultura dependa de la SEDESOL. Sencillamente será Secretaría de Desarrollo Social.
La SOPDU (antes Sopdue) que se divide en dos.
Se crea la nueva secrearía de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, que administrativamente manejará al Itavu y la Comisión Estatal del Agua.
Desaparece la llamada Agencia Ambiental cuyas funciones pasarán a la nueva dependencia (junto con el personal, muebles y vehículos).
Se crea la Secretaría del Trabajo, que tomará las funciones de la hoy Dirección del Trabajo dependiente de la General de Gobierno.
Desaparece la secretaría de Turismo que en realidad no sirvió para nada en los pocos años que tuvo vigencia.
Se fusiona con la de Desarrollo Económico, de donde dependía con anterioridad. Solo se le reacomoda.
La de Obras Públicas se llamará solo así, y verá reducidas en algo sus funciones, que ya eran basante extensas, como lo debe saber el señor Alberto Berlanga Bolado.
Lo raro es que no desaparezca la cartera de Desarrollo Rural, que no sirve para maldita la cosa.
Por lo que hace al resto de las secretarías, seguirán como hasta ahora: Que la General, que Finanzas, Seguridad Pública, Contraloría… y claro, Procuraduría.
En resumen: Egidio desaparece una secretaría y crea dos.
Sobre la misma jornada que sostendrán este día los diputados locales, hay que señalar que resolverán el “caso Cruillas” en que el alcalde José Felipe García anda “desaparecido”.
Sencillamente los legisladores aprobarán que, si si el presidetente propietario no concurre al llamado de la toma de protesta, entrará de inmediato en funciones el suplente.
Esto a través de modificaciones al Código Municipal de Tamaulipas, pero ¿y si un día se da por aparecido el propietario? ¿qué va a pasar?.
Todo está previsto mi amigo: “Cuando comparezca el titular del cargo cesa la función de su suplente, sin importar el momento en que esto ocurra”.
En la misma situación se encuentran los síndicos y regidores, que pudieran no presentarse a la ceremonia de protesta por alguna cruda rezagada o andar de compras en el lado gringo.
Se supone que esa “comparecencia” debe ser antes de dos años con nueve meses, porque de lo contrario…
Ah!, pero también se previó que los salones de sesiones del cabildo (en las presidencias) pudieran estar “tomados”, por lo que la ceremonia –en el municipio de que se trate- podrá realizarse en el lugar que “se acuerde” por parte de una tercera parte de los miembros del ayuntamiento, ya sea el saliente… O el entrante.
Ya veremos más detalles del proyecto administrativo de Egidio Torre Cantú, que parece que empieza bien al “apretar” donde es evidente que se dan fugas de recursos del erario.
La estructura que ideó parece estar bien, y mas si mencionamos que él ha laborado para Obras Públicas, que es la que registra más cambios. Debe saber muy bien por qué lo hace, a donde quiere llegar.Nos vamos.