Falta tiempo pero el reloj camina inexorable y no, claro que el PRI no va a perder, pero ¿sus socios?.
Todo apunta a que el tricolor no perderá ante el TRIFE ninguna de las cuatro diputaciones plurinominales que le asignó el Instituto Estatal Electoral.
Claro, el proceso tiene que seguir el curso normal ante los magistrados estatales y hasta llegar a la Sala Regional del alto tribunal, pero todo indica que es el camino a seguir.
Desde ahora caben algunas reflexiones de lo que sucederá. Esto, tomando en cuenta la resolución que emitieron el 28 de diciembre del 2007 para los integrantes de la 60 legislatura (hoy en funciones), en que el TRIFE le otorgó cuatro posiciones más a los azules, de las cuatro iniciales que le dio el IETAM.
Fue esa la primera “coalición gamundiana” que pretendía ampliar el número diputados del PRI y socios, en detrimento de la presencia de los panistas.
Da la impresión que, desde ahora, los tricolores quieren preparar a sus socios del Verde Ecologista y Panal, a que no serán premiados después de alborotarlos.
Los del PRI no sufrirán bajas: Serán diputados plurinominales Abdíes Pineda Morín, Anastacia Guadalupe Flores, Antonio Martínez Torres y Moisés Gerardo Balderas Castillo.
El asunto está en sus asociados: Jesús González Macías e Hilda Graciela Santana Turrubiates, que lo más probable es que no llegarán, aunque tampoco sufrirán derrota porque no hicieron campaña ni gastaron.
El meollo de la jurisprudencia está en que los partidos que juguaron bajo la figura de coalición parcial, no tienen derecho a la asignación.
En la resolución del 2007, el alto tribunal desechó a los plurinominales del Verde, Jesús González Macías (la primera que lo rechazaron) y Rigoberto Rodríguez Rangel, y del Panal, Noé Rodríguez García y Blanca Anzaldúa Nájera.
Pero del tricolor se quedó con dos posiciones, la de Ricardo Gamundi Rosas y Martha Guevara de la Rosa.
Hace tres años el IETAM y el TEE le asignaron cuatro diputaciones a los azules y ellos consiguieron otras cuatro en el tribunal federal. Se pronostica que ahora sucederá lo mismo.
En aquel tiempo, uno de los argumentos del tribunal federal fue que el Verde y el Panal no registraron candidatos –a nombre de su partido-, en los distritos donde fueron en coalición con el PRI.
Hoy sucedió lo mismo, los verdes y los panalistas tampoco registraron donde van coaligados ¿se repetira la historia?.
Y se fortalecen cada vez las opiniones de los abogados expertos: Ningún partido político puede tener más de 22 diputaciones.
Y menos deben tener los partidos a los que el tricolor “ayudó” a obtener el 1.5 por ciento de la votación total emitida, para llegar a las pluris.
Las cifras indican que el Verde por si mismo no alcanzó ese porcentaje el PRI le tuvo que “ayudar” con tres mil 512 sufragios. Mientras al Panal se le regalaron 599 sufragios para tratar de llegar al Congreso por la vía de representación proporcional.
Resulta que a través de la coalición, el Verde ya tendrá dos diputados (propuestos por ellos, como dice el documento), que son René Castillo de la Cruz y Rigoberto Rodríguez Rangel (Victoria y Mante).
Mientras tanto, los del Panal ya tienen las diputaciones de mayoría del segundo Distrito, Nuevo Laredo, y Décimo de Matamoros, respectivamente con Aurelio Uvalle Gallardo y Rosa Isela Arizoca (los dos orgullo del IV distrito).
Vamos a decir que, con la ayuda de su socio mayor, el Revolucionario, los dos “chiquillos” pretenden obtener tres escaños en el Congreso ¿lo merecen sus votos?.
De darse la distribución conforme lo planeó el tricolor, tendría 24 posiciones, más la de Ceniceros, del PT.
Pero en la práctica, un total de 28 diputados estarían saliendo de las filas del Revolucionario Institucional (más el del PT que es el eterno aliado).
En este tenor, se asegura de antemano que el ex partidazo no perderá plurinominales pero tampoco ganarán sus socios o aliados.
Luego entonces, si hay dignidad por parte de los minoritarios, sería la última vez que cruzan el río con el hermano mayor.
Y, si el portazo va derecho como parece, no hay que descartar que, en la nueva administración, los señalados (que no quedaron) aparezcan como prominentes funcionarios, aunque no hayan pagado ni un quinto en las campañas.
Antes de terminar, que estuvo con el Gobernador Electo de Tamaulipas, Egidio torre Cantú, el jovenazo alcalde azul de Padilla, Eduardo Alvarado García, quien le platicó de su causa.
Pero seguramente “Lalo”, el orgullo de Hualahuises, N. L., no le platicó que le gusta tirar bala, que tiene algunos expedientes por ahí por disparo de arma de fuego, golpes y lesiones.
Nos vamos.