Con una historia de casi 50 años, es la última que queda en la región.
Sí, la última de las academias de corte y confección lucha por mantenerse vigente. Y lo ha logrado al transformarse constantemente, ir acorde con la tecnolgía. De las viejas máquinas de coser, centenarias, hoy mantiene eléctricas.
La vida de la Academia Victoria forma parte de la historia de nuestra ciudad. De eso no cabe duda.
Decenas, cientos de mujeres victorenses, han pasado por sus mesas de diseño y talleres de confección para aprender, para resolver necesidades de familia, del vestido en el hogar.
Ya no hay escuelas particulares de costura en Victoria. Todas cerraron sus puertas ante la presencia de instancias oficiales, como el ITACE, que inclusive pagan por pertenecer a ellas.
Pero ¿El nivel académico y capacidad es saisfactoria?
-Es difícil que nos lleguen, dice su directora, Leticia Sánchez García de Silva.
-Somos una escuela con tradición…Todavía me preguntan si es la misma del Once y Morelos, y les digo: Sí, pero con nuevos programas.
Y en efecto así es:
-Me tocó cortar el papel de china para diseñar. Ahora hacemos el «patrón», lo plasmamos a la tela, y ha coser!.
La práctica, según sus palabras, es la mejor escuela.
Una egresada de la Victoria está capacitada para elaborar todo, desde ropa para dama hasta niños y caballeros, pasando por vestidos de novia y de noche. Solo dejan de incursionar en los sacos para caballero.
LARGA HISTORIA DE SU VIDA
La maestra SÁnchez García de Silva indica que la escuela tiene ya su historia. Comenzó a funcionar en 11 y Morelos en 1962.
Fue fundada por la maestra María del Rosario Treviño, «quien debió haber tenido entonces entre 18 y 19 años».
Más tarde la «Victoria» pasó a manos de María del Refugio Rodríguez de Muñiz, misma que traspasó a la profesora Sánchez.
-Me dijo que ya se sentía enferma, manifiesta.
No se sabe a ciencia cierta en qué año la maestra Rodríguez tomó la institución, pero debió haber sido por un espacio de diez años, cuando menos.
-Yo entré a la academia en 1982, como estudiante, y ella era la directora.
Hacia 1992, Sánchez de Silva se hizo cargo de la institución, mediante compra y traspaso ante las autoridades educativas.
Ella es maestra de instrucción primaria jubilada. Trabajó 29 años para el sistema.
La escuela está registrada en la SEP (hoy SET), donde tiene su reconocimiento sobre los diplomas que se extienden.
Los cursos para obtener el diploma son de dos aÑos.
ES LA MEJOR INSTITUCION
En la Victoria las mujeres que cursan pagan un colegiatura para financiar a la vez a las instructoras.
En la academia, las estudiantes tienen que pagar los materiales que utilizan y que son muchos. Elaborar por ejemplo 44 prendas de vestir en el primer año y 34 en el segundo.
Aunque las colegiaturas son bajas, la Victoria va resintiendo las consecuencias de la apertura del sector oficial.
Dice su directora:
-Estamos batallando desde que se abrió el curso en el ITACE y pagan por ir a aprender.
Pero claro que hay mucha diferencia entre uno y otro curso, comenta, como también con el trabajo que se ofrece en las maquiladoras de ropa.
-Con nosotros vienen sobre todo amas de cada, mas que todo vienen por aprender para vestir a su familia.
En tanto, en otras instituciones se ofrecen cursos muy rápidos y, en las aquiladoras, se les enseña a trabajar «en serie».
-Vienen muy seguido de las maquinadoras para buscar gente que trabaje (de las egresadas), pero nuestras alumnas están preparadas para formar sus propios talleres, crear microempresas familiares.
Aclara que las egresadas salen muy bien preparadas.
EL CORTE ES UN ARTE INFINITO
La directora va sacando parte de los archivos que guarda desde 1992 cuando se hizo cargo de la institución .
Señala que el programa de estudios de dos años, se fue formando a través de los ciclos de enseñanza; «fuimos sacando modelos».
Para continuar establece: El corte es infinito… Las bases continúan y lo que cambia es la moda.
Es tan infinito el corte y confección de ropa, que la moda llega a cambiar hasta dos veces por año, agrega,
-El principio básico que enseñamos es el mismo, lo que va cambiando es la moda.
-¿Con qué preparación sale la gente?
-Para confeccionar todo, desde la blusa más sencilla al vestido más complicado.
Ahí se imparten principios básicos de la sastrería, vestido de hombres y mujeres, pero menos se adentran en la elaboración de sacos para caballero, lo que mas bien correspondería a los sastres.
Las egresadas tienen capacidad para elaborar sacos para dama, pantalones, camisas para hombre y mujer.
Es más, en el segundo año de acitividad, inician con la elaboración de confecciones para caballero, desde camisa de manga corta hasta camisas vaqueras.
Los principios básicos del programa son los del «C y C», que la SEP tiene autorizados para instrucción secundaria, aunque en la Victoria fueron rediseñados y elaborados con ejemplos con un sistema profesional.
La profesora Sánchez reconoce que el corte y confección de ropa es un arte, «es la creatividad del alumno».
Manifiesta:
-Si una persona de aquí entra a una maquiladora, se echa a perder. Aquí diseña, corta y termina una pieza, en tanto que allá va a trabajar en serie.
Y más:
-Nuestras alumnas son capaces de ver un catálogo y hacer su propio modelo. Tienen posibilidades de elaborar vestidos de novia, que son laboriosos por los bordados y encajes que llevan, o también vestidos de noche.
Establece la directora que la moda es infinita y las posibildiades de trabajo también.
Hola buenas noches . necesitaria saber donde esta hubicada la escuela actualmente de confección .ya q necesitó el titulo q en su momento se recibio mi madre.
Sabes la ubicación o el teléfono de esta escuela actualmente?