Valle Hermoso.- Antigua colonia “18 de Marzo”, para los residentes de Valle Hermoso no fue fácil ser municipio libre. Se enfrentaron al entonces Gobernador Horacio Terán Zozaya, quien por todos los medios los bloqueó.
La lucha duró más de tres años, como lo indica el presidente del comité promunicipio libre de entonces, Don Santiago Guajardo Barrientos.
Fue el 20 de diciembre de 1950 cuando se creó el comité.
-Valle Hermoso vivía una situación muy difícil, de abandono por parte de las autoridades; formaba parte de Matamoros. Los presidentes municipales nunca pusieron atención.
“Lo que abundada mucho eran las cantinas y la prostitución. Era la época que llamábamos de la explotación del Oro Blanco, el algodón.
Aquí en los alrededores estaban funcionando ocho despepitadoras. Circulaba mucho dinero, principalmente el campesino, lo que era el ejidatario y parte de los colonos dilapidaban el dinero en las cantinas y centros de diversión pecaminosa.
Nosotros dijimos: Qué porvenir le espera a nuestros hijos en estas condiciones, en un medio tan corrompido que estamos viviendo.
“Las autoridades de Matamoros no nos hacían caso; de servicios, nada: No luz eléctrica, no agua potable y mucho menos drenaje.
“Nada de eso, no teléfono; había una caseta nada más; telégrafo tampoco, carreteras no, las calles se ponían en condiciones lamentables y prácticamente se perdía la comunicación porque eran brechas nada más.
“Vimos que la única solución era crear nuestras propias autoridades, nuestro propio municipio y teniendo nuestras propias autoridades a las que podíamos exigir o podíamos colaborar con ellas”.
Entonces se llamaba colonia 18 de Marzo y dependía de Matamoros.
El alcalde era Ernesto Elizondo.
Siempre se opuso tenazmente y el gobernador del estado, que era Horacio Terán, con más ganas, con más encono que el propio Presidsnte de Matamoros se opuso tenazmente.
QUE FILIBERTO BERNAL MARES
Guajardo es ingeniero agrónomo egresado de la Escuela Antonio Narro.
Cuenta que, para hacer la petición de municipio libre, buscaron los servicios del abogado Ciro R. De la Garza, originario de Burgos, quien más tarde sería Oficial Mayor de Gobierno y presidente del Supremo Tribunal de Justicia.
-Cuando se formó el comité, inmediatamente repartimos comisiones y una de ellas fue la encargada de hacer un estudio económico de lo que era la región, si afectábamos en una forma muy grande a Matamoros o no.
“Ese comité lo formó Don Santiago Salinas y el doctor Filiberto Bernal Mares. En un mes lo hicieron y los datos se los pasamos al abogado, quien dijo: Ustedes tienen todo el derecho de aspirar a ser municipio, no lesionan a Matamoros.
“Nos formuló la petición, la solicitud y la presentamos al Congreso. Fuimos un grupo como de 50 personas. Era Gobernador Terán, pero la legislatura en ese entonces pertenecía, en simpatías, al gobernador anterior, al general Gárate Legleu.
-¿En qué año presentaron la petición?
-Fue más o menos como en mayo de 1950.
“El Congreso afortunadamente no se llevaba bien con el Gobernador, porque era del anterior, y eso nos ayudó para que ellos vieran con simpatía nuestro movimiento, querían golpear a Terán.
“Expidieron el decreto en septiembre, pero desde luego que faltaba la firma del Gobernador y la publicación en el periódico oficial.
“El Gobernador terco, terco, le habló al presidente de Matamoros y prácticamente le ordenó que interpusiera un amparo para evitar la ejecución de ese decreto”.
EL GOBERNADOR PERDIO LOS AMPAROS
El asunto se ventiló en el juzgado de distrito de Tampico, cuyo titular le dio la razón al pueblo de la entonces colonia.
-Fuimos con la resolución del juez con el Gobernador a que la firmara, y nos dijo: No señor, yo no puedo firmar eso porque el municipio afectado tiene todo el derecho de pedir la revisión al Tribunal Colegiado.
Pero este tribunal también falló en contra del Gobernador y del ayuntamiento de Matamoros.
-Otra vez con el Gobernador, pero nos dijo: Yo no firmo eso, no firmo, no firmo, y no firmó. Así nos trajo 802 días, contaditos.
“Ya cansados; mire, recorríamos diferentes partes y medios pidiendo ayuda para nuestra causa. Nos tocó afortunadamente que vivía aquí un licenciado Flavio Nava. Este hombre fue muy valioso para nosotros para obtener el municipio.
Nava había sido condiscípulo del ex presidente Miguel Alemán, del Gobernador Terán Zozaya y del regente Ernesto P. Uruchurtu. En Valle Hermoso se dedicaba a cultivar la tierra.
-Afortunadamente dimos con él, había participado en la lucha por lograr la autonomía de la UNAM, y había sido de los bravos.
-Un amigo de Anáhuac, Don Jesús Palacios, me dijo: Qué dice el señor Gobernador ¿ya se anima a firmar?.
-No, el Gobernador está engúevado que no, por sus pistolas nada más.
-Oiga, por qué no ve al paisano…
-¿A qué paisano?
-Al licenciado Flavio Nava.
-¿Y quién es él?
-Es paisano nuestro, de Durango.
-¿Y dónde está, o qué?
-Mire, aquí está por la 70, nada más cruza la 120 y a dos kilómetros tiene su rancho.
NO TRABAJO CON CABRONES
Nava pidió reunirse con los miembros del comité a los que expuso.
-He aceptado con todo gusto participar, pero antes quisiera hacerles una pregunta ¿son ustedes hombres?
-Pues sí, sí somos hombres.
-Qué bueno, porque a mi me gusta trabajar con hombre, no con cabrones.
-¡Ha chingado!…Este es el que nosotros necesitábamos. Y empezamos la lucha.
Los miembros del comité e emancipación viajaron por todas partes alrededor de 20 mil kilómetros.
-A Victoria hicimos no menos de 15 viajes con una carretera infame. Teníamos que irnos por fuera de la carretera en grandes tramos. Decían que la mitad estaba buena y la otra mitad mala ¿y en dónde está la buena? No, medio metro de buena y medio de mala…Era puro bache!.
-¿Cuánto tiempo hacían?
-No menos de seis horas.
En busca de apoyo, un día fueron a ver al ingeniero Eduardo Chávez, creador de los grandes distritos de riego de Tamaulipas, y de quien se rumoraba que sería ministro de Agricultura de Adolfo Ruiz Cortines.
-Fuimos y llegamos a la casa de él en México, pero la señora, Doña Margarita, dijo que estaba en Morelia en el Plan de Pepalcatépetl con el general Cárdenas.
Y se fueron hasta Morelia pero no los apoyó.
-Dicen ustedes que el Gobernador no les ha hecho caso ni piensa hacerles caso. Oye Nacho, si ya saben que cuando las cosas se necesitan y están dentro de la Ley para pedirlas y, si no te hacen caso, pues qué chingados, hay otros medios, hay otros medios.
-Pero… la policía.
-Uhh¡, si le tienen miedo a cinco gatos con pistola, para que chingados quieren ser libres, sigan como están.
LA IRRITACION DEL GOBERNADOR
Los miembros del comité también estuvieron con Ernesto P. Uruchurtu, quien les ayudó con un estudio socioeconómico que, al final, fue enviado al Gobernador Terán Zozaya. No quería intervenir directamente por motivo de la soberanía del estado.
-Antes de 15 días ya teníamos aquí a un señor Raúl Monzón Aragón, que fue el que vino a hacer la investigación.
Pasó el tiempo y un día, ya desesperados –primero de marzo de 1953- fuimos a ver al Gobernador por última vez. El licenciado Nava iba a la cabeza.
-No estaba el Gobernador pero sí su Secretario General, Don Manuel Lerma Betancourt, que había sido condiscípulo de Terán y del licenciado Nava, y le dijo.
“Mira Manuelito, hazme el favor de decirle a Horacio que acepte nuestra mano de amigos, que por última vez venimos a tenderle, a suplicarle, no queremos guerra, chingado, pero si nos vemos obligados, pues tendremos que hacerla”.
Al salir de la General de Gobierno se toparon con el Oficial Mayor, que era Ciro R. De la Garza, quien les mostró el dictamen de Gobernación: El nuevo municipio podría crearse.
-Ya nos desmayábamos de gusto y fuimos a hablar a Valle Hermoso con Roberto Rodríguez Cavazos, que era uno de los cabecillas también y le dijimos: Llevamos una novedad muy grande para los vallehermosenses, hazme el favor de convocarlos en la plaza principal a las diez de la mañana.
Estuvieron alrededor de cinco mil personas que querían la emancipación.
Ese mismo día, se nombraron autoridades con Jesús Castillo Marroquín a la cabeza.
DIEZ MIL “COSAS” BIEN PUESTAS
Dice Guajardo:
-La gente deliraba y bailaba y cantaba.
Era domingo, y esa misma tarde el Gobernador los citó a ciudad Victoria para el lunes a las diez de la mañana.
-Fuimos ocho, muy contentos, pero nos dice Nava.
-No se estén alegrando porque este es muy cabrón, muy sucio.
Y en efecto, los llamó no para felicitarlos.
-Sin más se nos arrancó: Señores, los he hecho venir para hacerles saber la indignación que en lo personal y de mi gobierno ha causado ese paso fuera de la Ley, que ustedes han dado al nombrar a un grupo de individuos como autoridades de un nuevo municipio en el cual el gobierno no ha participado. Ustedes están fuera de la Ley.
Cuando terminó el Gobernador, Nava dio su respuesta.
-Dice usted que le ha causado indignación la conducta viril de los vallehermosenses, qué nos dirá ese pueblo viril y honesto, de un gobernante que sin obedecer la Ley lo ha detenido en la creación de su municipio nomás por sus propias pistolas,…No señor!.
Usted es el carnicero, nosotros somos la carne, corte usted, pero no olvide que el carnicero de hoy puede ser la res del mañana.
Con permiso de usted, ya nos retiraos, son las diez y media y debemos estar en Valle Hermoso antes de las cuatro donde el pueblo en masa, cinco mil hombres que tienen diez mil cosas bien puestas nos esperan, con su permiso… Nos vamos.
-Un momento Flavio, no se vaya.
-¿Qué?
El Gobernador dirigiéndose a los diputados:
-¿Se puede arreglar esto?
-Sí, sí.
¿En qué tiempo?
-En dos horas.
-No señores, que quede arreglado en una hora.
Era el cuatro de marzo.
Y desde entonces, la antigua colonia 18 de Marzo tiene vida propia como municipio libre.
La historia de por qué Valle Hermoso, es otra.