La indiscreción habría salido de la Comisión Política Permanente del PRI Nacional, de la que es secretario técnico un tal David Penchyna.
Dicha comisión realiza las funciones de Consejo Político Nacional, el que es difícil reunir, y por eso las decisiones las toman, según el artículo 33 de los estatutos, la presidenta (en este caso), el secretario general, el secretario técnico, el señalado secretario Penchyna y el diez por ciento de los consejeros nacionales.
David habría hecho una llamada a Tamaulipas para señalar que, desde la semana previa a la Nochebuena, “el caso Tamaulipas quedó resuelto” en favor de uno de los hombres mejor posicionados: Arturo Díez Gutiérrez Navarro, alcalde victorense.
El mensaje se fue pasando de boca en boca, a bajo perfil, con la advertencia de “nada más no le digas a nadie” y, para la Navidad, buen número ya estaba enterado, aunque sin llegar a los medios masivos.
La noche del sábado, una voz desde la frontera lo confirmó: El candidato a la gubernatura, por el PRI, será Díez Gutiérrez, y el consejo político estatal se reunirá el sábado 16 de enero en el Polyforum Victoria, a las seis de la tarde, para hacer el “destape oficial”.
En el camino se quedaron otros elementos, también de valía, como Rodolfo Torre Cantú, el médico de los pobres; José Manuel Assad Montelongo, “el compañero de banca en la primaria”, y Manuel Muñoz Cano, hechura y futuro de los nuevos tiempos.
Y los atributos le aparecen a Díez: El mejor hombre, el administrador perfecto para Tamaulipas, el político que aprendió rápido las jugadas maestras.
Será el segundo Gobernador -es imposible que gane el PAN- de la familia Díez en los últimos 120 años, después que su bisabuelo Carlos Díez Gutiérrez lo fue de San Luís Potosí, donde dejó una obra que todavía perdura, como son las vías férreas.
Y mire que ya lo habíamos dicho en esta misma colaboración: Arturo se manejó callado en sus acciones como alcalde, sin desplantes mediáticos, esperando la oportunidad y los tiempos de su partido, el PRI, al que se incorporó desde 1988, cuando fundó en Victoria su empresa Práctico Materiales (genera 60 empleos directos), hoy por hoy una de las firmas más progresistas de Tamaulipas, y la número diez en el norte del país en la distribución de cemento.
Ciertamente, Díez Navarro es uno de los hombres del sistema; proviene de un tronco familiar de políticos y hombres de negocios.
Nació el 15 de julio de 1962 en ciudad Victoria, y está casado con Alejandra Osuna Morales.
Es hijo de Carlos Díez Gutiérrez Coleman, nacido el 10 de noviembre de 1931 en Cárdenas, S. L. P, y de María de Jesús Navarro Vigil, también potosina, venida al mundo el nueve de septiembre de 1939.
Arturo es el tercero de siete hermanos: Eugenio, Carlos, Arturo, Martha Elena, Federico, Sergio y Héctor, todos orgullosamente victorenses.
Ejemplar padre de familia, tiene cuatro hijos: Arturo, de 16 años; Alan, de 14, Elsa de nueve y Alexa de seis.
Tiene un currículum impresionante en el mundo de los negocios. A los 19 años estudiaba su carrera de agrónomo y trabajaba en el rancho de sus padres.
Es orgullosamente egresado de la UAT.
Hábil en los negocios, como se le reconoce en el sector empresarial, ha sido consejero de instituciones bancarias tan sólidas como Banorte y HSBC, además de consejero de Coparmex y Canaco Victoria.
De su emoción social no hay ninguna duda, y existe una anécdota real que seguramente en los tiempos de campaña le dará la vuelta a Tamaulipas: De niño, en ocasión de una Navidad, con el corazón abierto, le regaló una bicicleta a un chiquitín sin recursos que anhelaba tener una.
Esa emoción social se acrecentó con los años, hasta desembocar en la alcaldía de Victoria donde ha realizado una extraordinaria labor, como se aprecia en sus dos informes de administración.
Siempre ligado a las buenas causas, antes prestó otros servicios como integrante de los patronatos del Asilo Vicentino y del Zoológico de Tamatán.
En 1994, a los 33 años, conoció a Luis Donaldo Colosio, se hicieron grandes amigos y, aunque el candidato presidencial fue muerto, Arturo siguió adelante con su labor y en 1998 ya formaba parte del Comité de Financiamiento del PRI para la campaña de Tomás Yarrington Ruvalcaba como candidato a Gobernador.
Sirvió a su partido desde diversas trincheras y, en el 2004, nuevamente fue llamado a la talacha, y en esta ocasión figuró como presidente del Comité de Financiamiento, en la campaña por la gubernatura del 2004.
Y bueno, Díez pasó por el PRI municipal, donde sirvió a plenitud, y hasta que fue seleccionado como candidato de su partido a la alcaldía del Corazón de Tamaulipas.
En círculos del CDE del PRI se mencionó que Díez Gutiérrez Navarro anda fuera del país, de vacaciones con su familia, pero el cuatro de enero ya estará en Ciudad Victoria para comenzar a recibir apoyos y la nominación a la gubernatura.
Ya no seguimos porque, querido lector, esta es una inocentada del 28 de diciembre. Usted ha de perdonar