Cd. Victoria, Tamaulipas.- Se indignó, gritó y manoteó cuando le enviaron afecto y cariño desde la máxima tribuna de Tamaulipas.
Un escándalo más armó el diputado perredista Jorge Osvaldo Valdez Vargas en el recinto de sesiones del Congreso del Estado.
Fue en la jornada legislativa de ese jueves, cuando se discutía el regreso del ITAVU al sector de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (SEDUMA), después de pertenecer a la SEDESOL a partir del 30 de agosto del 2012.
Valdez subió a la tribuna cinco veces, no para denunciar irregularidades del Instituto de la Vivienda y Urbanismo, sino para hacer un llamado a sus compañeros “para que no se otorguen caprichos personales” a funcionarios que en otros tiempos utilizaron el organismo con fines políticos.
-Yo en ningún momento cuestioné el trabajo de ITAVU. Estoy de acuerdo en que se regrese a la otra secretaría, de donde nunca debió haber salido –repitió.
Muy a su estilo comenzó a “repartir” para el ex titular de la dependencia, Homero de la Garza Tamez, que en fecha reciente presentó renuncia a la SEDESOL.
-No quisiera pensar que Homero se llevó el Itavu para enriquecerse más y abultar su cartera como se dijo por ahí, y que fue consecuencia que renunciara.
Y hasta para los diputados panistas:
-Conozco las malas costumbres de uno que otro panista –y se refirió a los “cabezones” (partidarios de Cabeza de Vaca).
La iniciativa, aprobada al final por todos los diputados, modifica la estructura de la Ley Orgánica de la Administración Pública del estado “para redefinir la arquitectura institucional”, según el dictamen aprobado un día antes.
El motivo es que, con fecha dos de diciembre del 2012, el gobierno federal creó la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, que tomó las atribuciones de vivienda y tenencia de la tierra que antes tenía la SEDESOL como cabeza de sector.
Para hacer congruente el trajo estatal con la dependencia federal, el ejecutivo decidió hacer un traslado similar de esas funciones.
Los panistas también habían dado su visto bueno al proyecto, como lo señaló el legislador Juan Martín Reyna García, cuando dijo:
-Los integrantes del grupo parlamentario del PAN, no tenemos inconvenientes en la aprobación de las reformas y derogaciones.
A la vez el representante del Partido del Trabajo, Arcenio Ortega Lozano:
-Ha estado funcionando bien (el ITAVU), y es cierto – pero cuestionó que se de el uso del Instituto para caprichos personales de secretarios en turno, como según sus palabras lo hizo De la Garza Tamez.
Subieron a la tribuna Erasmo González Robledo, ex delegado del Instituto en Madero, y Heriberto Ruiz Tijerina, que en otros tiempos dirigió el antecedente del organismo, para aprobar el funcionamiento de la dependencia.
En su tercera intervención, ya con tono más agresivo, el perredista arremetió en contra de los ex delegados que ahora son diputados en la 62 legislatura.
La respuesta fue de Rigoberto Garza Faz, de Reynosa, quien precisamente fue representante del organismo en aquella ciudad.
Su participación fue muy breve:
-Nuestro cariño y respeto para el diputado Jorge.
En seguida regresó a su butaca.
Su mensaje, calificado por los reporteros como “cachetada con guante blanco”, indignó al de Nuevo Laredo y exigió el uso de la palabra pero ya la tenía González Robledo.
A los gritos y reclamos de Valdez se unió el panista Federico Elizondo Salazar, alegando que las palabras de “cariño” del priísta no se consideraban como propuesta de debate sino de agresión.
Después de media hora en que se paralizó la sesión ante los gritos del ex presidente estatal del Partido de la Revolución Democrática, todos felices y contentos. El dictamen fue aprobado por unanimidad de votos.
En cuanto el decreto se publique en el Periódico Oficial del Estado, el Instituto Tamaulipeco de Vivienda y Urbanismo pasará a depender de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente.